Alberto Fernández Díaz ha elegido la plaza Sant Jaume para anunciar que no seguirá en el Ayuntamiento de Barcelona, al que ha estado ligado durante 27 de los 56 años de su vida. No ha querido hacerlo en un local cerrado, sino al aire libre, junto al pesebre instalado este año por los Comuns y que tanto le ha indignado.
Fernández ha hecho un balance pormenorizado de sus muchos momentos importantes en el consistorio y hasta se le han escapado algunas lágrimas, especialmente cuando ha recordado los malos momentos -asesinatos de miembros del PP a cargo de ETA-, aunque también ha contado anécdotas divertidas y ha querido señalar como recuerdo más alegre el día que Barcelona fue elegida para organizar los JJOO de 1992.
El líder del PP ha dejado claro que no repetirá como candidato a la Alcaldía en la capital catalana, aunque terminará el mandato como concejal y como presidente del grupo municipal popular.
"No repetiré como candidato a la alcaldía porque... ¡hasta aquí he llegado! Son muchos años ya, y creo que es importante renovar esfuerzos y compromisos con personas que, sin duda, dejarán el pabellón del PP muy alto", ha dicho Fernández, que ha estado acompañado en tan solemne ocasión por los otros dos concejales del PP en el consistorio, así como por la exconcejal y diputada en el Congreso Àngels Esteller.
EL MÁS VIEJO DEL LUGAR
"Mi compromiso con el partido y con la ciudad se mantendrá intacto", ha asegurado Fernández, que dejará el Ayuntamiento "con la sensación del deber cumplido" después de esos 27 años como concejal en dos etapas: la primera de 1987 a 1999 y, la segunda, desde 2003 -cuando se presentó como alcaldable, algo que hizo también en 2007, 2011 y 2015.
Fernández, que ha avanzado que prevé volver al ámbito privado de la abogacía -aunque seguirá meditándolo-, ha destacado que "hace mucho que había expresado esta disposición a ceder el relevo", y que su momento ha llegado este lunes, también para evitar un vacío en el PP en Barcelona.
A propósito del adiós de Fernández, el PP todavía no ha anunciado su candidato a las elecciones municipales del próximo mayo, aunque sí ha decidido que se presentará en solitario, ya que descarta hacerlo con la plataforma del exprimer ministro francés Manuel Valls, que concurre con el apoyo de Ciudadanos. Suena mucho el nombre de José Bou, presidente de Empresaris de Catalunya.
LA CIUDAD, ANTES QUE EL PARTIDO
Fernández ha defendido que siempre ha ejercido su cargo desde una oposición nítida y representando unas ideas de centro-derecha, así como unos principios sólidos que nunca ha escondido. "Pero que conste que siempre he puesto la ciudad por delante de las siglas de partido", ha recalcado.
De sus momentos más felices, y al margen de cuando Barcelona ganó la candidatura olímpica, ha recordado también los acuerdos que alcanzó el PP con el entonces ejecutivo de Pasqual Maragall. Y ha insistido en que el más triste fue cuando fueron asesinaron al concejal de Viladecavalls Francisco Cano y al de Sant Adrià de Besòs José Luis Ruiz Casado, algo que le ha llevado a emocionarse y a soltar algunas lágrimas.