La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, someterá a la decisión de la Junta de Portavoces del Ayuntamiento de la capital catalana si el consistorio vuelve a colocar en la fachada del edificio situado en la plaza de Sant Jaume el lazo amarillo en solidaridad con los independentistas encarcelados en Madrid.
Desde su partido han explicado que “si la Junta de Portavoces está de acuerdo, volveremos a poner el símbolo en el balcón del Ayuntamiento”.
Pancarta con lazo amarillo colgado en la fachada del Ayuntamiento de Barcelona
EL LAZO, A DEBATE
El lazo amarillo será un de los primeros asuntos de debate entre los dos nuevos socios de gobierno municipal, Barcelona en Comú y el partido socialista, ya que el grupo de Ada Colau fue partidario de colocarlo en el anterior mandato, mientras que la formación liderada por Jaume Collboni no es favorable a situar el símbolo en la plaza de Sant Jaume.
Por contra, el lazo amarillo podría volver a la fachada porqué, aparte de Barcelona en Comú, Esquerra Republicana y Junts per Catalunya también son partidarios de colocarlo y los tres grupos municipales sumarían la mayoría para volverlo a poner.
Fue en marzo cuando Ada Colau decidió retirar el símbolo amarillo del consistorio barcelonés. Los de Barcelona en Comú, a diferencia de la Generalitat, acataron las órdenes de la Junta Electoral y procedieron a retirar el lazo de la fachada. La Junta Electoral de Zona de Barcelona había ordenado a la alcaldesa retirar el lazo en un plazo de 12 horas, porqué consideraron que el símbolo vulneraba "flagrantemente la neutralidad del Ayuntamiento" puesto que exteriorizaba la ideología de determinados partidos y personas que concurrían a las elecciones.