El Ayuntamiento de Barcelona adjudicó este jueves 3 de octubre un contrato de 332.000 euros a la cooperativa Ètic Habitat, una sociedad que en los últimos dos años ha pasado de ser inexistente en las bases de datos municipales a facturar millones de euros. Desde la oposición se sigue con interés la evolución de la contratación con esta cooperativa porque entre sus socios está David Companyon, exdiputado y excoordinador de ICV, los socios ecosocialistas de Barcelona en Comú (BeC). Companyon fue también el enlace extraoficial entre la CUP y los restantes partidos independentistas en todo el procés. Un familiar suyo, Oriol Companyon, es el director de Ètic Habitat. Se da la circunstancia de que éste es un destacado militante de BeC.
El contrato adjudicado el 3 de octubre tiene por objeto “los servicios de apoyo a la organización de comunidades de vecinos y vecinas con medidas de contratación pública sostenible”, según consta en el acta de la comisión de gobierno del área de Economía. Un informe municipal detalla que esos servicios de apoyo tienen como objetivo “la ejecución de intervenciones y actuaciones en comunidades de vecinos para la mejora de su autonomía y toma de decisiones en relación con su organización, convivencia y resolución de los propios conflictos, así como el de dar apoyo en el territorio con la intervención con las comunidades de vecinos/as desde las intervenciones preventivas”.
DOS AÑOS DE PROYECTO
Entre otros cometidos, la cooperativa ha de promover las bases “para alcanzar el sentimiento de pertenencia, la cohesión social del barrio, de su tejido social y de sus comunidades a través del desarrollo de hábitos cívicos, de la organización de los espacios comunitarios y de la mejora de la convivencia”. La duración del proyecto será de 24 meses desde el 13 de octubre de 2019. Aunque desde el Ayuntamiento se apunta a que hubo dos empresas que optaron al concurso, no existe acta de adjudicación y en la diligencia de adjudicación sólo consta el nombre de Ètic Habitat.
El pasado mes de junio, esta empresa ya había conseguido otro contrato de 124.713 euros `por la “dirección facultativa de las obras de rehabilitación y adaptación funcional y servicios de valoración de la situación socioeconómica de las viviendas acogidas al programa de arreglo de viviendas de personas en situación de vulnerabilidad en la ciudad de Barcelona”. Ètic Habitat fue la única empresa que se presentó a ese concurso.
LOS SUCULENTOS BOCADOS
En el 2018, el bocado fue más suculento: se hizo con tres lotes de un macro contrato de más de 1,1 millones de euros. Tampoco había otros licitadores en ese concurso por “asistencia técnica para el impulso y apoyo en obras de rehabilitación de edificios de viviendas en el marco del Plan de Barrios, así como el fomento de la eficiencia social”. El contrato, con una duración de un año y 8 meses (finalizará dentro de pocos meses), contenía una cláusula de prórroga, por lo que su valor estimado alcanza más de 2,4 millones de euros. De momento, no obstante, Ètic Habitat se hizo con los 1,1 millones de la primera adjudicación y habrá que esperar unos meses para saber si consolida la prórroga que le supondría otro suculento contrato.
El director de Ètic Habitat, Oriol companyon / CG
CGTambién en octubre del año pasado se hizo con otro contrato de 215.380 euros por un programa de “convivencia entre vecinos y vecinas y propietarios/as de viviendas y otros alojamientos de uso turístico”, según el contrato firmado el 16 de noviembre del 2018. Nuevamente la cooperativa de los Companyon compitió sin rival para hacerse con el contrato.
Ètic Habitat se fundó como empresa hace siete años, pero se convirtió en cooperativa hace cinco años. Oriol Companyon, director de la compañía, señaló a Metrópoli Abierta que Ètic Habitat “se dedica a realizar proyectos sociales de acción comunitaria y para diferentes administraciones”. Consciente de las críticas que concita la adjudicación de contratos importantes desde el 2017, el directivo subraya que “la cooperativa no está vinculada a nadie, sino que la forman los socios. Y, evidentemente, no pedimos a los socios cuál es su color político. Es más: tenemos socios de todas las condiciones y colores políticos”. La cooperativa tiene 38 socios.
“TRABAJAMOS CON MUCHOS AYUNTAMIENTOS”
Asegura también que “nosotros nos presentamos a los concursos cuyas cláusulas y licitaciones son públicas. Y, al ser concursos, se adjudican a la mejor oferta licitada. Todos los procesos, además, están en el portal de la transparencia”. Asegura, no obstante, que una adjudicación relacionada con el Plan de Barrios fue el primer contrato obtenido del Ayuntamiento de Barcelona. “Y fue en el 2017, aunque luego hubo otro del 2018”.
En el 17, según los listados del propio Ayuntamiento, Ètic Habitat obtuvo dos pequeños contratos: uno de 3.000 euros por el “servicio de apoyo a la gestión de medidas educativas y prestaciones de beneficios a la comunidad”, otorgado por el distrito de Gràcia, y otro del mismo distrito, de 13.000 euros, por la “dinamización y el fomento del comercio en Gràcia”. Oriol Companyon se defiende de las críticas de la oposición afirmando que “trabajamos para todas las administraciones y para ayuntamientos que son tanto de PSC como de JxCat. E incluso para la Generalitat de Cataluña. ¡Y no creo que nos tilden de ser de JxCat por haber obtenido contratos del Govern!”, explica a este diario.
Entre sus clientes, por ejemplo, figuran ayuntamientos como el de Sitges, Viladecans, Salt, Gavà o Canovelles y organismos como el Institut Català del Sòl (Incasol) o el departamento de Trabajo de la Generalitat e incluso la Universidad Autonóma de Barcelona (UAB), la fundación Paco Puerto, de CCOO o diferentes instituciones educativas. Lo cierto, no obstante, es que los contratos que levantan sospechas son los del Ayuntamiento de Barcelona, no sólo por las vinculaciones políticas de los Companyon, sino también por el elevado volumen económico de los contratos que se les adjudican desde 2017. Lo suyo parece ser una carrera meteórica en el mundo de los negocios.