El Ayuntamiento de Barcelona se prepara para una “edición especial de las Fiestas de la Mercè en aislamiento”. Tras la suspensión de múltiples eventos, conciertos y jornadas llenas de gente, ahora el teniente de alcalde de Cultura del consistorio de la ciudad, Joan Subirats, avanza que ve difícil que se permitan las concentraciones multitudinarias.
Subirats ha explicado que “estamos seguros que no se podrán hacer unas fiestas de la Mercè como las de cada año”, motivo por el cual se decanta por “reinventarlas”. En una entrevista en Betevé el miembro del Ayuntamiento ha afirmado que “las concentraciones en la playa serán complicadas de ver, al igual que el Piromusical”.
EVITAR LA SENSACIÓN DE BLOQUEO EN LA CULTURA
Por contra, el teniente de alcalde de Cultura señala que “no desistiremos en encontrar fórmulas diferentes” que permitan “evitar la sensación de bloqueo del mundo de la cultura y de las fiestas en las calles”.
En cuanto a las salas de cine, Subirats ha asegurado que “tienen ganas de abrir, aunque sea con un 33% del aforo”, mientras que en las salas de teatro es más complicado “porque los gastos que tendrían serían peores que estar cerradas”.
SIN CIUDAD INVITADA
El Ayuntamiento de Barcelona ha decidido posponer la presencia de La Habana hasta 2021 –ciudad invitada–, han confirmado fuentes del Instituto de Cultura de Barcelona (ICUB) a Metrópoli Abierta. La decisión la ha comunicado esta semana el teniente de alcaldía de Cultura, Joan Subirats, a los grupos municipales. Desde 2007, la fiesta mayor de Barcelona cuenta con una ciudad del mundo invitada. Este año, la tradición se romperá por la pandemia del coronavirus.
RECONFIGURAR EL PROGRAMA
Por ahora, las fiestas de la Mercè se mantienen, aunque el formato que tendrán dependerá de la evolución que tenga la pandemia. El ICUB informa que en julio podrá detallar más cómo queda la Mercè de 2020.