La concesión de licencias de los patinetes eléctricos en Barcelona está bajo sospecha y podría haber incurrido en un conflicto de intereses. Rosa Alarcón, concejal de Movilidad del gobierno que lidera Ada Colau, ha adjudicado a dedo un contrato menor por encargarse del asesoramiento jurídico de la regulación para los patinetes a Uría Menéndez. Este bufete de abogados, curiosamente, ha asesorado en el pasado a Lime, empresa de patinetes eléctricos compartidos participada por Uber.
Es decir, el despacho madrileño --uno de los de mayor facturación del país-- ha participado en la elaboración de una normativa municipal sobre la cual tenía intereses uno de sus clientes. Este movimiento ha inquietado al sector, que ve un posible conflicto de intereses, según alertan a este medio.
El Ayuntamiento de Barcelona, según ha podido saber Metrópoli Abierta, ha abonado 16.335 euros a Uría Menéndez por redactar los pliegos de la nueva normativa bajo la que se regirán los patinetes eléctricos en la Ciudad Condal.
LIME, CLIENTES DE URÍA
Fuentes de Uría aseguran que en el pasado han trabajado con Lime, "pero nunca en Barcelona, sino en Valencia y Zaragoza". "Tenemos una buena relación con ellos, pero no hacemos nada con Lime desde hace casi un año", explican a este medio. Según la misma fuente, el bufete de abogados trabaja desde hace años con el Ayuntamiento de Barcelona y recalca: "Se trata de un contrato menor y la adjudicación se ha hecho con total transparencia".
Fuentes del Ayuntamiento de Barcelona, por su parte, aseguran que han aplicado "con total corrección la legislación de contratos del sector público vigente". "El contrato menor se ha adjudicado conforme con la ley", añaden desde el consistorio barcelonés. En el Ayuntamiento sostienen también que Uría Menéndez no asesora "actualmente" a Lime y que no existe "conflicto de intereses".
URÍA Y EL AYUNTAMIENTO
No obstante, el despacho ha sido cuestionado en el pasado por sus relaciones con el equipo de Ada Colau. En 2016, este bufete cobró más de 100.000 euros por sus trabajos de asesoramiento en materia de servicios funerarios, según informó Crónica Global. Entonces, los negocios de Uría Menéndez con el Ayuntamiento de Barcelona generaron malestar entre sus clientes, recelosos de que ayudara a los comunes en la remunicipalización de servicios.
Este 2020, el despacho pijo madrileño ha vuelto a hacer negocio con el consistorio barcelonés. Durante el segundo trimestre de este año, Uría Menéndez se ha llevado dos contratos a dedo más, aparte del mencionado sobre patinetes. Uno, de 17.557,10 euros por asesoramiento jurídico en la "concesión de licencias de uso común"; y otro de 16.335,00 euros, por asesoramiento jurídico en la unión del tranvía por la Diagonal [ver los tres contratos aquí].
Fuentes del sector señalan que es llamativa esta relación entre Uría Menéndez y el Ayuntamiento durante la redacción de la nueva normativa para patinetes, habida cuenta de su relación con Lime, uno de los pesos pesados apoyado por una gran multinacional como Uber. Temen que la futura norma bajo la que se regirán beneficie a las grandes compañías como Uber, en detrimento de las startups y empresas locales.