Los servicios sociales de Barcelona atendieron a un total de 88.375 personas durante 2020, un 11% más respecto al 2019, lo que el Ayuntamiento ha calificado de "nuevo máximo histórico" alcanzado en gran parte por la irrupción de la pandemia y la crisis económica que ha comportado.

En rueda de prensa este viernes, la comisionada de Acció Social, Sonia Fuertes, ha valorado este incremento de la demanda de servicios sociales como un resultado de la precariedad previa que ya existía en la ciudad y que ha crecido a raíz de la pandemia, cuando más gente se ha visto abocada a pedir ayuda.

De hecho, el 32% de las personas que se atendieron a partir de marzo, cuando se inició la pandemia, no había acudido nunca a servicios sociales, que han registrado en Nou Barris (38.005) y Ciutat Vella (36.187) el mayor volumen de actividad, seguido de Sants-Montjuïc (32.595), Sant Martí (31.837) y El Eixample (30.066).

En Horta-Guinardó atendieron a 27.218 personas, en Sant Andreu 20.526, y los distritos con menos volumen de actividad fueron Gràcia (15.678), Sarrià-Sant Gervasi (10.509) y Les Corts (8.839).

Teniendo en cuenta el número de atenciones, ya que cada persona puede recibir más de una, en 2020 se realizaron 251.460, lo que supone un incremento del 36,4% en relación a las 184.344 realizadas el año anterior, y la mayoría fueron atenciones telefónicas (201.957).

46,5 MILLONES EN AYUDAS

La irrupción del coronavirus ha provocado también un aumento de las ayudas económicas que ha otorgado el Ayuntamiento y durante 2020 distribuyeron 46,4 millones de euros, de los cuales 14,9 corresponden a 6.877 ayudas del fondo extraordinario covid y los 31,5 millones restantes a las ayudas de emergencia.

Han ido dirigidas especialmente a ayudas de alimentación directas –28.213 por valor de 6,4 millones (433% más respecto el 2019)– y para vivienda, donde se destinaron 24 millones, de los cuales 19,8 corresponden al sufragio de alojamientos de emergencia en pensiones, hostales y hoteles, y los 4,2 restantes para cubrir gastos de alojamiento.

SERVICIOS DE ALIMENTACIÓN

Por lo que respecta a los servicios de alimentación, el consistorio ha distribuido 557.068 comidas entre 17.482 personas que acuden a los 18 comedores sociales de la ciudad, y ha entregado 281.471 comidas a domicilio, de las que se han beneficiado 1.448 personas, un 120% más.

Se atendió a 3.420 personas a partir de los diferentes dispositivos extraordinarios de distribución de comidas, que recibieron en torno a 430.520 comidas, y se otorgaron 19 subvenciones por valor de 800.000 euros a entidades del tercer sector para garantizar la cobertura de necesidades alimentarias básicas.

REFUERZO DE LOS SERVICIOS SOCIALES

Para hacer frente al incremento de la demanda, el Institut Municipal de Serveis Socials (IMSS) reforzó temporalmente 40 centros de servicios sociales de la ciudad con 28 nuevos trabajadores a partir de octubre, que se distribuyeron por los distritos con un mayor volumen de actividad.

Así, el número actual de trabajadores sociales en los centros se sitúa en los 348, una cifra que el consistorio trabaja para aumentar en el marco del nuevo contrato programa que se está negociando con la Generalitat para 2021.

Este refuerzo, ha incidido Fuertes, ha permitido que el tiempo de respuesta entre que las personas contactan por primera vez con servicios sociales y entre que reciben la primera cita se haya reducido en un 28%, de manera que el tiempo actual ha pasado de 21 días a 15.

La comisionada ha reconocido la tarea de función social que se ha hecho desde el consistorio, sobre todo ante la respuesta a la pandemia, que ha calificado de ingente, ágil y flexible, y ha advertido de que esta situación podría continuar siendo muy difícil o empeorar si no se consigue una buena implementación de ingresos.

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