David Bondia y Ramon Nicolau se la juegan para ser el nuevo síndic de Barcelona
Colau busca el consenso de los grupos políticos con uno de estos nombres, el primero próximo a ella y el segundo socialista
22 junio, 2021 00:00Noticias relacionadas
El relevo del síndic o síndica de greuges de Barcelona ya está encima de la mesa de los grupos municipales. La Junta de Portavoces del Ayuntamiento, que reúne a representantes de todas las formaciones políticas, ha tratado este lunes por primera vez el tema con el objetivo de que la persona que debe sustituir a Maria Assumpció Vilà sea elegida en el pleno de finales de julio.
Según ha podido saber Metrópoli por parte de distintos partidos, el gobierno municipal ha puesto dos nombres sobre la mesa para sustituir a Vilà. Se trata de David Bondia, presidente del Institut de Drets Humans de Catalunya y próximo a Colau, según distintas formaciones políticas, y Ramon Nicolau, exconcejal del PSC en el Ayuntamiento de Barcelona. Bondia fue el ganador de forma clara del proceso participativo no vinculante -en él solo tomaron parte poco más de 3.000 personas de toda la ciudad-, y Nicolau es el aspirante que cuenta con más apoyo de las entidades de la ciudad.
EL APOYO DE DOS TERCERAS PARTES DEL PLENO
Ahora, los grupos deberán ponerse de acuerdo para consensuar un nombre. El nuevo síndic o síndica de Barcelona, la figura que defiende a los ciudadanos ante la Administración local, debe contar con el apoyo de dos terceras partes del pleno, esto es 27/28 regidores sobre 41. Por ahora, ni Bondia ni Nicolau cuentan con los apoyos necesarios. Algunas fuentes municipales consultadas por este medio prevén que costará hallar un consenso.
Las opciones de Bondia pasan porque Barcelona en Comú, ERC y PSC le apoyen. Entre los tres partidos suman 28 concejales, una mayoría suficiente. Por ahora, la formación que pondría más reticencias de las tres a apoyar a Bondia serían los socialistas, según ha podido saber este medio. El PSC tiene a su propio candidato, el citado Nicolau, que recibió el apoyo de 77 entidades de la ciudad, aunque está por ver si mantiene el apoyo por él hasta el final.
APOYO DE ENTIDADES PRÓXIMAS A COLAU
El resto de formaciones políticas con representación municipal -JuntsxCatalunya, PP, Ciutadans, Barcelona pel Canvi y la regidora no adscrita Marilén Barceló- parece difícil que apoyen a Bondia, a quien se ve muy próximo a los comunes. Ya pasó así en 2016, cuando el activista proderechos humanos intentó ser el defensor de los barceloneses, y fue vetado por el entonces PDeCAT de Xavier Trias y otros grupos.
Entre las entidades que apoyan a Bondia figuran el Observatori Desc y la asociación Enginyeria Sense Fronteres (Cataluña). Ambas han recibido cuantiosas ayudas del Ayuntamiento de Barcelona, y Colau trabajó siete años en el citado observatorio. Regidores del arco constitucionalista se muestran más partidarios de votar a favor de Nicolau. Así lo han expresado a este medio a pesar de su pasado como edil socialista en el gobierno de Jordi Hereu.
EXCONCEJAL DE HEREU
Nicolau fue concejal de Inmigración, Cooperación, Participación y Solidaridad (2006-2007), comisionado de Participación Ciudadana (entre 2007 y 2010) y edil del Eixample (entre 2010 y 2011), y parece difícil que, de entrada, acabe contando con el voto de ERC ni de Barcelona en Comú, que suman entre ambas formaciones 20 concejales.
Fuentes del gobierno municipal apuntan que se ha abierto el periodo de tanteo y negociación pero que todavía no se ha entrado en el fondo de la cuestión. Algunos de los aspirantes consultados por este medio no descartan que en la elección del nuevo síndic o síndica se pongan sobre la mesa otros temas que nada tienen que ver con la elección y sean objeto de negociación entre los grupos municipales para acabar dando el apoyo a una u otra persona. Y más con la división existente entre los dos socios de gobierno en cuestiones fundamentales de la ciudad.
OCHO ASPIRANTES
A falta de un mes para que se elija al nuevo síndic o síndica -si es que el proceso no se alarga-, parece claro que los grupos municipales tardarán en encontrar un nombre que genere consenso, y si se hace con rapidez se podría dar la circunstancia de que la persona escogida salga sin el voto unánime de todo el pleno municipal. Hasta ahora, las dos anteriores síndicas, Pilar Malla y Vilà, recibieron el visto bueno de todo el Consejo Plenario cuando fueron nombradas por primera vez. Solo en la reelección de Vilà, en 2016, la CUP se abstuvo. No salir con el respaldo de todo el pleno es un flaco favor a una institución que debe estar al servicio de toda la ciudadanía y ser apolítica.
A ser el nuevo defensor/a de los barceloneses aspiran ocho personas. Además de Bondia y Nicolau figuran otros seis candidatos. Se trata del líder vecinal Jordi Giró, la exportavoz del sindicato del ámbito de la educación USTEC Rosa Cañadell, el abogado Ricardo de la Rosa y el educador social Rafel López, la arquitecta y urbanista Zaida Muxí y la historiadora Isabel Alonso. Si los grupos no se ponen de acuerdo en elegir a Bondia y Nicolau, no hay que descartar que se opte por alguna otra persona que genere el acuerdo de los grupos a pesar de que en las anteriores fases del proceso de elección hayan contado con un menor apoyo de las entidades o de los ciudadanos.
Hasta ahora, Barcelona solo ha tenido mujeres dirigiendo la institución, las citadas Malla (entre los años 2005 y 2010) y Vilà, que ocupa el cargo desde 2010. El cargo de síndic o síndica de Barcelona es por cinco años con la posibilidad de renovar por otros cinco. El sueldo de la persona que está al frente de la Sindicatura de Greuges es de 81.972 euros brutos anuales.
SIN ÓRDENES DE POLÍTICOS
La función del síndic o síndica de Barcelona es la defensa de las libertades públicas y los derechos fundamentales de la ciudadanía de la capital catalana, y la institución que encabeza esta figura es la encargada de supervisar las actuaciones del Ayuntamiento. Aunque el órgano depende económicamente del consistorio, el defensor/a no recibe órdenes de ningún gobierno ni del alcalde o alcaldesa.