Centro Comercial La Maquinista en una imagen de archivo / EUROPA PRESS

Centro Comercial La Maquinista en una imagen de archivo / EUROPA PRESS

Información municipal

Barcelona cierra el litigio por ampliar La Maquinista

El Ayuntamiento publica la aprobación del plan de crecimiento del centro comercial

21 agosto, 2021 09:59

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Durante el primer mandato de Ada Colau (2015-2019), la alcaldesa de Barcelona denegó el plan de mejora urbana (PMU) presentado por el propietario del centro comercial La Maquinista para ampliarlo. Unibail-Rodamco-Westfield, dueño del establecimiento, lanzó en 2015 un litigio con el consistorio. El contencioso ha terminado esta semana con la publicación oficial de su propuesta de crecimiento, pactada entre ambas partes.

EXPANSIÓN DE LA MAQUINISTA

La teniente de alcalde de Urbanismo, Janet Sanz, ya anunció en julio el pacto con el operador y la comisión de gobierno le dio el visto bueno. El acuerdo entre la administración y la Maquinista desbloquea un proyecto que contempla que el espacio comercial crezca en 21.000 metros cuadrados de superficie en el distrito de Sant Andreu. La inversión creará más comercios, edificios, oficias y locales de proximidad.

La expansión del centro comercial contempla otras concesiones al consistorio. El plan de Unibail incluye edificios de hasta 17 plantas y obras para facilitar el acceso al centro comercial en transporte público o bicicleta, según avanza Crónica Global.

PLAN “DESPROPORCIONADO”

La ampliación de La Maquinista pactada entre su operador y el Ayuntamiento de Barcelona es fruto de años de contactos entre ambas partes para "reorientar" una iniciativa que preveía hasta 42.000 nuevos metros cuadrados de tiendas. Ahora serán la mitad porque el consistorio los veía "desproporcionados".

El nuevo plan, cuya aprobación final se prevé para final de año o inicios de 2022, cuenta con un presupuesto de 250 millones. Permitirá la creación de un millar de empleos y contempla que las dos partes liquiden las acciones judiciales que les enfrentaban desde que el equipo de Ada Colau detuvo el proyecto en 2015.