Manuel Valls ya es historia en Barcelona. La renuncia del exprimer ministro francés a su cargo como concejal se ha formalizado este miércoles, 15 de septiembre, en un pleno extraordinario. Como avanzó Metrópoli, Valls presentó la dimisión el pasado 31 de agosto a través de una carta. La marcha del político era un secreto a voces desde hacía meses que él mismo confirmó en una entrevista en El Mundo.
La salida de Valls comportará cambios en el grupo de Barcelona pel Canvi. Los más evidentes son que Valls será sustituido por Òscar Benítez, hasta ahora director de seguridad de bus de TMB y consejero del partido en el distrito de Sant Martí, y que Eva Parera asumirá la presidencia de la formación en el Ayuntamiento. El nombramiento de Benítez tendrá lugar antes del pleno del 29 de septiembre.
VALLS NO HA HECHO APARICIÓN EN EL PLENO DE SU DESPEDIDA
La marcha de Valls se ha producido por la puerta de atrás, sin aparecer en el pleno -ni siquiera de forma virtual- y sin despedirse personalmente de sus compañeros de cámara. En la sesión tampoco se han producido intervenciones. Ni siquiera Ada Colau -que es alcaldesa gracias a los votos del exministro de Interior galo- le ha dedicado unas palabras a Valls. La salida ha recibido el visto bueno de todos los grupos y apenas ha durado un minuto.
BARCELONA, ÁREA CON UN MERCADO DE VIVIENDA TENSO
El pleno de este miércoles se había convocado para declarar la capital catalana como un "área con un mercado de vivienda tenso". La declaración es necesaria para que la Ley de regulación de alquileres, aprobada por el Parlament de Catalunya, siga vigente en la ciudad. Estaba previsto que fuera en el pleno del 29 de septiembre, pero se ha tenido que avanzar por los plazos administrativos.
Con la aprobación definitiva de Barcelona como una ciudad con un área de mercado de vivienda tenso se garantiza que la limitación de precios se puede aplicar durante cinco años. Según el Ayuntamiento de Barcelona, la medida permitirá que, desde este septiembre, el precio de un nuevo contrato de alquiler será el más bajo entre el precio del contrato anterior o bien el 95% del precio del índice de precios de referencia de la Generalitat [más información, ver aquí]
La declaración ha contado con los votos favorables de los grupos municipales del gobierno, Barcelona en Comú y PSC, y dos partidos de la oposición, ERC y JuntsxCat. Ciutadans, PP, Barcelona pel Canvi y la regidora no adscrita Marilén Barceló, que dejó el partido naranja hace unos meses por discrepancias con la presidenta del partido en el Ayuntamiento Mariluz Guilarte, se han posicionado en contra.
ALEGACIONES DE LAS GRANDES INMOBILIARIAS
La regidora de Vivienda Lucía Martín ha criticado en el pleno que las alegaciones contra la declaración de Barcelona como área tensionada han sido presentadas por grandes promotoras inmobiliarias y ha recordado que la capital catalana es una de las ciudades en la que los inquilinos dedican más dinero de sus ingresos a pagar un piso o una casa.
ERC, a través de la edil Eva Baró, ha criticado el "decepcionante" papel de los comunes en el Gobierno español para regular los precios de alquiler y ha asegurado que incluso en Barcelona la declaración podría haberse no aprobado por un despiste del gobierno. "Se ha tenido que hacer deprisa y corriendo a seis días antes de que se cumpliera el plazo".
BARCELONA, UN 2% DE VIVIENDA PÚBLICA
Según Guilarte, de Ciutadans, la oferta de alquiler ha caído en Barcelona un 40%. Ha añadido que la declaración es "populista" y ha recordado que Cataluña es la comunidad española con menos vivienda pública. En Barcelona, el porcentaje de vivienda pública es del 2%. Minutos antes, la regidora de JuntsxCat, Neus Munté, ha criticado la nefasta política de vivienda de Colau y ha puesto el dedo en el alto precio que el gobierno de la ciudad ha pagado por una finca en la calle de Balmes para convertirla en vivienda social. "Cada piso ha costado más de 300.000 euros".
Para el PP, la declaración de Barcelona como ciudad tensionada en el ámbito del alquiler reducirá la oferta y provocará la aparición de un mercado negro, ha señalado el concejal Óscar Ramírez. Para los populares, la ley catalana para regular los alquileres es "anticonstitucional".
DETERIORARÁ EL PARQUE DE VIVIENDAS, SEGÚN PARERA
Barcelona pel Canvi se ha expresado de la misma forma que el PP. Según Eva Parera, la ley catalana está recurrida en los tribunales. "Genera inseguridad jurídica y no funciona. Hay ciudades que la han tenido que derogar. Reducirá la oferta de alquileres y deteriorará el parque de viviendas. No entienden cómo funciona el mercado de viviendas en la ciudad". Para la regidora no adscrita, las políticas de vivienda de la ciudad no funcionan y ha resaltado que la culpa no es del sector privado. "Es parte de la solución", ha indicado Barceló.