En junio de 2010, el Barómetro municipal dio al entonces alcalde Jordi Hereu un 4,1 de nota. La valoración es la más baja obtenida por un alcalde desde hace 11 años. Hacía pocas semanas que acababa de celebrarse la polémica consulta para la reforma de la Diagonal que arrojó un resultado arrollador: el 79,8% de los participantes votó en contra de tocar la calle. Fue el peor resultado para Hereu y el PSC, que proponían dos diseños para la arteria, ambos con el tranvía de por medio. La ciudadanía, alrededor de un 12% (150.000 personas), dijo que No a las obras e, indirectamente, al tranvía.
El Barómetro de junio de 2010 se hizo entre el 10 y el 19 de junio, pocas semanas después de la consulta. Hereu sacó el citado 4,1. Xavier Trias, el líder mejor valorado, aprobó con un 5,2. Faltaba un año para las elecciones de 2011. La consulta de la Diagonal fue la tumba política de Hereu, que perdió los comicios, y Trias se convirtió en el nuevo alcalde de Barcelona.
SOLO GUILARTE Y BOU, POR DETRÁS DE COLAU
Desde entonces, entre 2011 y 2021, ningún alcalde o alcaldesa de Barcelona había sacado una nota tan baja como la de Colau en el Barómetro presentado este lunes, 27 de diciembre. La líder de Barcelona en Comú ha obtenido un 4,2 y solo dos líderes municipales tienen peor nota: Mariluz Guilarte, de Ciutadans, con un 4, y Josep Bou, del PP, con un 3,1, que casi siempre son de los peor valorados. El único cabeza de lista que aprueba es Ernest Maragall, que logra un 5,2. Colau tiene por delante incluso a Jaume Colboni (4,7), Eva Parera (4,5) y Elsa Artadi (4,4). Trias en su momento más bajo como alcalde logró un 4,9. Fue en junio de 2014, y aún así fue el líder municipal mejor valorado.
Desde que Colau llegara a la alcaldía, en junio de 2015, la primera edil de la ciudad no había obtenido un resultado tan malo. Ahora, solo le queda el Barómetro de junio de 2022 para recuperar posiciones. En la encuesta municipal de diciembre del 2022 no se preguntará por liderazgos por ser la última antes de las elecciones de 2023. Ya se hizo así en diciembre de 2010, 2014 y 2018.
EL ÚLTIMO APROBADO, EN JUNIO DE 2019
En estos últimos seis años, Colau logró su mejor nota en junio de 2018: un 5,4. El último aprobado es de junio de 2019, un 5,2. De eso, hace dos años y medio. Desde entonces, la valoración de la edil se ha traducido en números rojos: 4,7 en diciembre de 2019, 4,9 en julio de 2020, 4,3 en diciembre de 2020 y 4,7 en junio de 2021.
El 4,2 de Colau llega en un contexto muy negativo para el gobierno municipal. Casi la mitad de los barceloneses, el 49,4%, considera la gestión municipal mala o muy mala, la inseguridad lleva tres años como el principal problema de la ciudad, y ahora vuelve a subir casi siete puntos respecto al Barómetro del pasado verano, y la limpieza se eleva hasta el segundo lugar del ránking de preocupaciones ciudadanas, con un 11,8% del total de los encuestados.
VOTO DE LOS COMUNES SOBRERREPRESENTADO
Eso sí, en medio de un contexto tan negativo para la alcaldesa y la gestión municipal, un dato llama poderosamente la atención en el Barómetro de este diciembre: Barcelona en Comú se dispara en intención de voto (14,8%), por delante de ERC (10,2%) y PSC (7,4%), socio de gobierno de Colau, que pierde más de dos puntos.
Distintas fuentes municipales consultadas explican que en el Barómetro hay una clara "sobreestimación del voto de Barcelona en Comú" respecto a los resultados electorales de 2019 (recuerdo de voto), lo que influye en la intención directa de voto, un 6,8% por encima del voto real, apuntan las fuentes consultadas. Los datos tienen poco sentido, ya que una mayor intención de voto hacia Barcelona en Comú no se traduce en unos mejores indicadores de ciudad ni personales de Colau. Solo el 37% de los ciudadanos aprueban la gestión municipal, mientras que en su valoración como alcaldesa, Colau logra votos negativos por parte del 48,8% de la población frente al 47,3% que la aprueban.
TRIPLE EMPATE
La ponderación de ese recuerdo de voto, respecto a las elecciones de 2019, ofrece unos datos muy diferentes. Así, si se cruzan las respuestas entre lo que la gente votaría ahora y el recuerdo de lo que pasó en mayo de 2019 arroja un triple empate en intención de voto en Barcelona entre ERC, Barcelona en Comú y PSC: el partido de Colau obtendría un 9,9% de los sufragios; los socialistas, un 8,6%, y los republicanos, un 8,5% [ver cuadro adjunto en esta información]. A menos de un año y medio de las elecciones, se hace difícil saber quién será el próximo alcalde o alcaldesa de Barcelona. La gran mayoría de partidos ni siquiera han decidido quién será su cabeza de lista.