La concejal de Comercio del Ayuntamiento de Barcelona, Montserrat Ballarín, ha asegurado en la comisión de Economía que el consistorio ha rechazado la mediación judicial que pidieron las 11 antiguas pajarerías de La Rambla contra la resolución del Gobierno municipal de declarar agotadas las concesiones de estos establecimientos.
"Se ha pedido una mediación judicial que consideramos que no es posible. En este caso, porque todos los intentos de diálogo han fracasado porque en el momento que debía optarse por el diálogo se optó por la vía judicial", ha dicho.
REFORMA DE LA RAMBLA
Según el portavoz de los antiguos pajareros de La Rambla, Javier Cuenca, la Sindicatura de Greuges de Barcelona instó al consistorio a dialogar ante su voluntad de cerrar las paradas en el marco de la reforma de la Rambla, pero dada su supuesta negativa a hacerlo y tras presentar los paradistas varios contenciosos --aún no resueltos--, pidieron la citada mediación judicial conjunta.
El Ayuntamiento de Barcelona desalojará inminentemente las antiguas pajarerías de La Rambla, convertidas desde hace años en tiendas de souvernirs. El desahucio podría producirse en breve, ya que los gestores de estos locales recibieron a finales de enero una notificación informativa avisando que el desalojo se produciría en un mes.
50 AÑOS
Las concesiones de las antiguas pajarerías se otorgaron en 1971 y tenían una duración de 50 años. En el año 2000 ecologistas y vecinos denunciaron que los gestores de estas tiendas de animales lanzaban ejemplares muertos a la basura y que incumplían la Ley. En 2009, el gobierno de Jordi Hereu (PSC) retiró la licencia para vender animales.
Actualmente hay 11 locales que mantienen una lucha por la legitimidad de la concesión desde hace cuatro años.
EXTINCIÓN DE LICENCIAS
El 14 de junio de 2021, una resolución del Ayuntamiento declaró la extinción de las concesiones. Asegura el consistorio que tiene derecho a clausurar y a demoler las paradas y se acoge al nuevo plan especial de ordenación de La Rambla, que no prevé que estos 11 puntos de venta sigan en pie.