A los casi 73 años, Celestino Corbacho pone fin a su carrera política este viernes 30 de septiembre. El concejal de Ciutadans se ha despedido en el pleno municipal. Metrópoli ya había avanzado que el exiministro de Trabajo y exalcalde de L'Hospitalet de Llobregat se retiraba para jubilarse. "Le prometí a mi mujer que el 14 de noviembre, el día de mi cumpleaños, estaría fuera", explicó. "Me despido de todos con un buen recuerdo", ha dicho en el pleno.
NOEMÍ MARTÍN, LA SUSTITUTA
Con la renuncia de Corbacho, el Ayuntamiento de Barcelona trasladará la misma a la Junta Electoral Central para que la baja del político sea cubierta por la siguiente persona de la coalición Barcelona pel Canvi-Ciutadans que se presentó a las elecciones municipales de 2019 y que encabezó Manuel Valls. Entrará como regidora Noemí Martín, que actualmente es consejera de Ciutadans en el distrito de Nou Barris y fue la número ocho de la lista.
En su intervención, Corbacho ha enfatizado que no hay mejor colofón a su carrera que acabar en la política municipal y "en una gran ciudad" como Barcelona. El ya exconcejal ha deseado suerte a todos los partidos en las próximas municipales y que el resultado de los comicios sea el más beneficioso para la ciudad y los ciudadanos.
ALCALDE DE L'HOSPITALET ENTRE 1994 Y 2008
De esta forma Corbacho cierra una prolífica carrera. Estuvo al frente del Ayuntamiento de la segunda ciudad de Cataluña entre 1994 y 2008. Para Corbacho, el paso por la política municipal ha sido el más atractivo. De sus años en L'Hospitalet destacó en una entrevista con Metrópoli, entre otros proyectos, la transformación de la Gran Via y la plaza de Europa y la construcción de equipamientos deportivos y sociales. Entre los pabellones que se levantaron bajo su mandato figuran los de los barrios de Sant Feliu, Centre y Bellvitge.
Tras dejar la alcaldía de L'Hospitalet, Corbacho fue nombrado ministro de Trabajo en el Gobierno español que presidía José Luis Rodríguez Zapatero. "Ha sido el cargo más importante que he ostentado", indicó. Sobre su paso por la presidencia de la Diputació de Barcelona, entre 2004 y 2008, dijo que fue una etapa de "confort".
FICHADO POR MANUEL VALLS
Corbacho llegó al Ayuntamiento de Barcelona de la mano de Valls. El exprimer ministro francés ya dejó el Ayuntamiento a finales del verano de 2021 y ahora está desaparecido tras perder las legislativas francesas en junio y cerrar su cuenta de Twitter. Corbacho fue el número tres de la coalición de Barcelona pel Canvi-Ciutadans que el político galo encabezó en mayo de 2019. Valls sacó seis ediles y uno de ellos fue Corbacho.
VOTÓ A FAVOR DE LA INVESTIDURA DE COLAU
El día de la investidura, en junio de 2019, el propio Valls, Eva Parera (actualmente regidora y presidenta de Valents, el partido en el que se ha convertido Barcelona pel Canvi) y Corbacho votaron a favor de hacer alcaldesa a Ada Colau para que la ciudad no fuera gobernada por un partido independentista (la ERC de Ernest Maragall), mientras que Mariluz Guilarte, Paco Sierra y Marilén Barceló se posicionaron en contra de que Colau fuera reelegida alcaldesa. A la postre, esta división provocó que la coalición electoral quedara partida en dos grupos municipales distintos, Barcelona pel Canvi y Ciutadans.
A los pocos días de la votación de la investidura, Corbacho abandonó a Valls y se pasó a Ciutadans, como informó en exclusiva Metrópoli. "Decidí ir a Ciutadans y no me arrepiento. Ciutadans me ofrecía más posibilidades para hacer mi trabajo. Barcelona pel Canvi era un proyecto muy incipiente", valoró entonces el exalcalde de L'Hospitalet.