Barcelona en Comú y PSC han cerrado in extremis un acuerdo para el presupuesto de Barcelona de 2023. Tras días de complejas y duras negociaciones, ambos partidos han alcanzado un consenso para las últimas cuentas del mandato municipal. En mayo del próximo año hay elecciones.
Según ha podido saber Metrópoli de fuentes municipales, el pacto de Ada Colau y Jaume Collboni podría rondar los 3.500 millones de euros, unos 100 millones más que el presupuesto de este año. Si no se producen cambios, la presentación será este viernes.
A COMISIÓN, LA PRÓXIMA SEMANA
Tras el acuerdo entre comunes y socialistas, las dos formaciones iniciarán las rondas de contacto con la oposición para contar con los respaldos necesarios para aprobar el presupuesto, a poder ser antes del 31 de diciembre. En 2022, las cuentas salieron adelante por el voto favorable de Valents.
El primer trámite para dar luz verde a las cuentas tendrá lugar la próxima semana en la comisión de Economía.
El gobierno de Colau y Collboni ha decidido también congelar las tasas y los impuestos para 2023, han informado desde el Ayuntamiento. De esta forma, los tributos barceloneses no se incrementarán por tercer año consecutivo -2021, 2022 y 2023-, aunque en 2020, en plena pandemia, la subida fue muy alta, tanto que el grupo de Ciutadans tildó el incremento de "impuestazo".
Algunos de los proyectos que han dilatado el acuerdo del presupuesto entre PSC y Barcelona en Comú han sido la cobertura de la ronda de Dalt, la adecuación del túnel de la Rovira, la nueva fase de obras en el polígono Canyelles y la bonificación del 75% de la tasa de terrazas.
Las distintas fuentes consultadas no han dado detalles los acuerdos alcanzados a la espera de que se presenten el viernes.