Barcelona paga 230.000 euros para organizar una cumbre en la que “repensar la ciudad”

Tras la crisis del covid-19 y con el peligro aún presente de las consecuencias de la guerra de Ucrania, la recuperación económica de Barcelona es una emergencia. El Ayuntamiento prepara para la segunda quincena de marzo del próximo año unas Jornadas de Reactivación Económica que pretenden ser un punto de inflexión para el futuro de la ciudad.

Las jornadas, que se financiarán con fondos europeos Next Generation, dependen del área económica del consistorio, bajo la batuta del primer teniente de alcalde, el socialista Jaume Collboni. Organizar el evento será responsabilidad de la unión temporal de empresas (UTE) Anteverti Barter, formada por Anteverti Consuting y Barter Partnership, que cobrará 230.868 euros por el trabajo. Se trata de dos empresas con experiencia en actos similares, que fueron contratadas el pasado martes para que vayan preparando el terreno: deberán encargarse no solo de la logística, sino de elaborar el listado de entidades que se involucrarán, la organización de las jornadas, la confección de los programas de actividades, la dirección de la secretaría técnica y la elaboración del plan de trabajo y el cronograma.

A LA TERCERA VA LA VENCIDA

En 2021 y 2020 ya hubo unas jornadas similares, pero lastradas por la coyuntura internacional: en 2020, por la expansión de la epidemia del covid; en 2021, por los efectos perniciosos de la guerra entre Rusia y Ucrania. En 2023, se quiere abordar “no solo las cuestiones inmediatas, sino que las jornadas sirvan para poner la vista en el medio y largo plazo”. Se trata de proyectar y definir los retos de futuro y decidir cómo recuperar y mantener el impulso y la vitalidad que siempre han caracterizado a la ciudad. En otras palabras: en las propias cláusulas del contrato con Anteverti Barter se especifica que se quiere plantear “un evento focalizado en repensar y relanzar el modelo económico de Barcelona. Un evento con la voluntad de consolidarse y tener continuidad en los próximos años”.

La Rambla de Barcelona, una de las zonas donde se concentran más empresas de ocio y turismo / EFE

Ha pasado solo un año desde que hubo el primer conato de realizar unas jornadas de reactivación, pero poco se ha podido hacer. La primera edición fue totalmente virtual. La segunda, en la primavera pasada, ya fue presencial, pero aun con graves carencias. A la tercera va la vencida. El evento que se quiere hacer el año que viene quiere hacerse servir como “hoja de ruta para la recuperación económica de Barcelona”, conforme indican explica el Ayuntamiento en sus informes internos.

INDICADORES POSITIVOS

Los responsables municipales confeccionaron un dosier sobre la situación coyuntural y la necesidad de contratar a un coordinador para relanzar Barcelona. “El Ayuntamiento impulsa, a través de una medida de gobierno específica, la definición de un Pacto por Barcelona para reimpulsar la ciudad desde todos los ámbitos y que ayude a la recuperación social y económica”, dice el informe. Ese pacto tiene la voluntad “de ser un pacto que vaya más allá de la propia actividad competencial del Ayuntamiento, que ha de superar las fronteras de la política municipal y que se quiere construir con una visión que contemple la ciudad desde su globalidad, desde la generosidad, el consenso y el acuerdo. Un pacto que permita también trabajar para fortalecer el tejido económico y social de la ciudad, poniendo en valor sus riquezas y fortalezas, y que éstas sean también palancas para impulsar un crecimiento social, económica y ambientalmente sostenible”.

¿Qué se hará en unas jornadas de esta naturaleza? En primer lugar, “proponer nuevos modelos de promoción económica generados a partir del consenso y compromisos compartidos por los diferentes actores académicos, sociales e institucionales”. Pero también dar a conocer las políticas de promoción económica que se están poniendo en marcha y conectar con actores internacionales para proyectar una imagen positiva de Barcelona. El camino marcado por la recuperación del turismo hasta el 85% de las cifras de antes de la pandemia es un síntoma positivo, consolidado por la agencia Evercom, que sitúa a la capital catalana como el destino turístico número 1 del Mediterráneo. Además, según el consistorio, el índice de recuperación comercial se situaba, hace un mes, en un 121% respecto a las cifras de antes de la crisis sanitaria.

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, junto al primer teniente de alcalde, Jaume Collboni / EFE

EN EL CENTRE DE DISSENY DHUB

En esa coyuntura favorable, a la ciudad le queda favorecer “la coordinación de los sectores económicos y las políticas públicas de promoción para combatir la crisis y mostrar capacidad de liderazgo para conducir la transformación económica”. Los responsables municipales han previsto que la sede central de las jornadas sea el Centre de Disseny DHUB, del que se utilizarán varios de sus espacios, pero también se prevé la realización de debates y sesiones en hasta 4 escenarios diferentes de la ciudad, que todavía están por determinar.