El pasado 22 de diciembre, mientras la lotería nacional regaba con millones de euros algunos hogares españoles, Colau repartía millones entre algunas empresas amigas en un singular concurso que debía estar listo antes de fin de año para que su efecto pudiese comenzar a tener vigor el 1 de enero de 2023. El encargo era un caramelito en dulce: se repartió el pastel en 10 lotes, uno perteneciente a cada distrito de la ciudad, pero tres de ellos quedaron desiertos: se trata de los distritos de Eixample, Sant Andreu y Sant Martí, que deberán volver a licitarse.
El resto de los distritos (siete en total) supondrán un desembolso de más de 3,4 millones de euros los próximos dos años, que podrían duplicarse y llegar a los 6,8 millones si se aplica la cláusula de renovación de la concesión por dos años que prevén las cláusulas de los contratos. Esa elevada cantidad ha sido repartida entre sólo 3 empresas, contratistas habituales del Ayuntamiento.
APOYO A ACTOS CULTURALES Y POPULARES
Lo que sacó a concurso el Ayuntamiento es el suministro o alquiler de material de infraestructuras, como estructuras no permanentes desmontables, mobiliario y material de iluminación y sonido. Todo este material es indispensable, según el Ayuntamiento, para el desarrollo de los actos que tengan previstos los distritos municipales de la ciudad. Se trata, según la Administración local, de “actos populares y culturales que están recogidos en las cartas de servicios”. Ahí se recogen también los programas de los distritos de promoción cultural y cohesión social para “fomentar la vida asociativa, la cultural, la participación ciudadana, la generación de procesos de relación social y de identificación colectiva”.
Se necesita la ayuda externa para preparar todos esos actos, tanto para montar y desmontar tarimas, por ejemplo, como para realizar las reuniones preparatorias de los actos propiamente dichos. Las tareas a desarrollar, en la mayoría de los casos, requieren de técnicos especialistas en esas actividades para la adecuación de los espacios donde se celebren los eventos y para llevar el seguimiento y apoyo a los mismos.
CANDIDATOS SIN COMPETENCIA
La curiosidad, no obstante, radica en el hecho de que en cada lote se presentó solamente a la licitación una de las compañías mencionadas, salvo en uno de ellos, en el que presentaron ofertas dos de ellas y fue adjudicado a una en concreto. Esta singularidad hace brotar sospechas sobre un posible reparto del mercado en estas adjudicaciones. A simple vista, parece como si hubiese un pacto de caballeros para repartirse el pastel. O, dicho en otras palabras, se le podría aplicar el refrán de entre bomberos no nos pisemos las mangueras.
Las empresas citadas son viejas conocidas de las licitaciones municipales de Barcelona: Iniciatives Events, Serveis del Espectacle Focus y Serveis L’Espectacle Rulot. Las tres reciben cuantiosas adjudicaciones del Ayuntamiento de Barcelona. Entre los criterios que puntuaron para llevarse los contratos, según recogen las actas de la mesa de contratación, figuran las posibles rebajas lineales que podían hacer las adjudicatarias.
Con esa decisión, se entiende todavía menos el hecho de que no compitiesen más empresas o no pugnasen entre ellas por los diferentes lotes, puesto que una cláusula de esta índole da luz verde a presentar presupuestos más competitivos. De rebote, además, la Administración pública saldría beneficiada, al poder competir distintas rebajas en los precios. En ese aspecto, las licitantes podían sumar 17,5 puntos por rebajas en el alquiler de estructuras desmontables o mobiliario y otro tanto en sonido y luz. Por estar dados de alta en el registro de productores de residuos se podían apuntar otros 10 puntos y utilizar transporte no contaminante les añadía 10 puntos a la nota final.
UNA EMPRESA BAJO SOSPECHA
La decisión final de los responsables municipales fue conceder dos distritos a Focus, dos más a Iniciatives Events y tres a Rulot. La primera de las empresas se llevará la organización de todos los actos de Ciutat Vella (774.452 euros) y Nou Barris (670.835 euros), un suculento bocado de más de 1,4 millones de euros. Rulot, por su parte, se llevó los de Les Corts (313.087 euros), Gràcia (510.620 euros) y Horta (524.975 euros). En total, pues, alrededor de 1,3 millones de euros.
Iniciatives Events, por su parte, añade a su cuenta particular los contratos de Sarrià (273.140 euros) y Sants-Montjuïc (383.335 euros), unos 650.000 euros. Se da la circunstancia de que esta empresa está siendo investigada desde varios frentes, supuestamente por amañar contratos públicos. La Autoridad Catalana de la Competència (ACCO) está revisando los contratos que tiene con Presidencia de la Generalitat por supuesto amaño. Además, es una de las empresas investigadas por el juzgado de
instrucción número 1 de Barcelona, en el marco de la Operación Voloh, por supuesto fraude en la licitación de contratos de organismos de la Generalitat. Durante esa investigación, se grabó una conversación de uno de los dueños de la compañía con un alto cargo municipal en la que hablaban de cómo hacer trampa para adjudicar contratos públicos municipales y burlar la ley.