Un inmueble histórico de Barcelona ya tiene adjudicada una segunda vida. Se trata de Can Miralletes, una masía del siglo XVIII ubicada en el barrio del Camp de l'Arpa del Clot. El espacio, abandonado durante años a la espera de su rehabilitación, fue reformado por el Ayuntamiento el año pasado para acoger un reivindicado uso vecinal al mismo tiempo que se garantizó su conservación como elemento patrimonial de la ciudad.
La finca acogerá un espacio infantil dedicado al ocio y la educación en materia medioambiental aprovechando su integración en los jardines que cobran el mismo nombre que la masía. De esta forma, el gobierno municipal dinamizará el nuevo equipamiento en sintonía con la petición de los residentes.
ADJUDICACIÓN
El Ayuntamiento ha adjudicado este mes de septiembre la dinamización y gestión de Can Miralletes, basado en un servicio de ocio y educación ambiental para el que se ha destinado una partida de 146.136 euros, que ha recaído sobre la empresa Talher, especializada en educación ambiental y gestión turística y cultural.
La masía de Can Miralletes, en obras / JORDI SUBIRANA
La compañía adjudicataria se encargará de llevar a cabo estos trabajos durante dos años, con posibilidad de prórroga de ocho meses. Durante este año se destinarán 48.711 euros, mientras que en 2024 la partida será de 73.068 euros y en 2025 se establecerá en 24.356 euros.
TRABAJOS
La empresa beneficiaria deberá reconvertir la masía en un espacio de educación ambiental donde se impulsen proyectos de educación, sensibilización y conocimiento, relacionados con el ámbito de la sostenibilidad y el cambio climático. La dinamización del inmueble se dirigirá a niños de hasta 12 años, familias, escuelas, entidades y centros de promoción social y cultural.
Para garantizar su correcto funcionamiento, se deberá diseñar un proyecto de actividades lúdicas y educativas que incluya un espacio de juego interior, exterior y sensorial, una zona de orientación, la realización de talleres y actividades sobre medio ambiente, visitas escolares y jornadas de contenido ambiental. El consistorio también contempla la creación de un catálogo de recursos lúdico-ambientales, la promoción de los programas de medio ambiente y el intercambio y préstamo de juguetes.
El nuevo equipamiento operará de martes a sábado a excepción del mes de agosto, cuando permanecerá cerrado. Respecto al personal requerido, la instalación deberá contar con un trabajador con formación universitaria relacionada con el medioambiente y un segundo empleado con una preparación mínima de grado medio de la familia profesional de los servicios culturales y a la comunidad, que ejercerán como dinamizadores y coordinadores.
Jardines y masía de Can Miralletes / AJ BCN
MASÍA HISTÓRICA
La masía de Can Miralletes, que data de 1736, es una edificación singular que cuenta con una superficie de unos 290 metros cuadrados y que está construida con la técnica de la bóveda catalana. Su nombre se debe a Pere Miralletes, quien fue uno de los propietarios de la extensión agrícola que rodeaba el inmueble.
En los años 70, una promoción inmobiliaria hizo peligrar la continuidad de esta finca histórica, pero el movimiento vecinal evitó su desaparición. El Ayuntamiento compró el espacio en 1998, que temporalmente funcionó como un restaurante de cocina catalana, y construyó los jardines que continúan presentes a día de hoy.
En 2016 se inició un proceso participativo para su futuro uso, en el que se consideró una utilización social, priorizando a niños y familias. La apuesta, mantenida por los vecinos del Camp de l'Arpa del Clot que lucharon por la rehabilitación de la masía realizada a finales del mandato pasado, se materializará con la tratada adjudicación después de que se confirmara el año pasado. Este servicio se mantendrá, como mínimo, hasta 2025.