Barcelona desalojará a la fuerza los quioscos de helados y souvenirs de la Rambla si no entregan las llaves
El gobierno de Collboni ha lanzado un ultimátum a los propietarios de las antiguas pajarerías, abiertas desde 1855
25 julio, 2024 12:30Jarro de agua fría sobre los quiosqueros de las antiguas pajarerías de la Rambla, hoy reconvertidas en quioscos de dulces, helados y souvenirs. El Ayuntamiento de Barcelona ha activado la vía judicial para desalojar “forzosamente” a los paradistas, después de que estos no hayan devuelto las llaves al Institut Municipal de Mercats, tal como les exigió el consistorio. La notificación municipal llega dos semanas después de que la Justicia suspendiera cautelarmente su cierre.
Ultimátum a los quiosqueros
El gobierno de Collboni ha lanzado un ultimátum a los propietarios de las pajarerías este mismo jueves a primera hora de la mañana para recuperar las llaves de los quioscos, arraigados a la Rambla desde hace más de 100 años. Al recibir una negativa por parte de los afectados, el consistorio ha decidido pedir a un juez que las desalojen de inmediato.
Según ha detallado el director de Servicios Jurídicos del ayuntamiento, Manuel Mayo, es pronto para concretar cuándo se llevarán a cabo los desahucios, que dependen de los plazos de los juzgados. Asimismo, ha afirmado que “son procedimientos que se resuelven rápido”.
El cierre de las pajarerías ya se anunció como efecto colateral de los trabajos de reforma de la Rambla. Mallo ha subrayado que la obra pública “está por encima” de la licencia y que esta debe eliminarse igualmente.
13 años de litigio judicial
Esta decisión llega después de años de litigio judicial entre el Ayuntamiento de Barcelona y los propietarios. En 2003, la Ley de Protección de Animales prohibió la venta de estos en las 11 paradas que había por aquel entonces, actividad que realizaban desde 1971, cuando se concedieron las licencias. Al prohibirse la venta de animales, el consistorio se ofreció a buscar una solución y en 2010 estableció un convenio para transformar las pajarerías en quioscos de dulces, helados y souvenirs, como han hecho hasta ahora.
En 2011, la justicia declaró nulas las licencias por “distintos incumplimientos” en la tramitación municipal y en 2021 caducó la concesión de 50 años que tenían los paradistas.
Alternativas para los paradistas
El ayuntamiento defiende que ha hablado con los paradistas para “hacer una transición ordenada y respetando todos los derechos, incluso ofreciendo una compensación”, un plan de recolocación o un plan de apoyo para los trabajadores, entre otras opciones.
Mallo ha asegurado que la actitud del consistorio ha sido, en todo momento, muy respetuosa, recalcando que “en 13 años no hemos forzado la máquina, hemos ido paso a paso”. Desde el gobierno municipal defienden que es lo que seguirán haciendo a partir de ahora.