Fotomontaje de Ada Colau y Javier Burón con el Ayuntamiento en el fondo / METRÓPOLI

Fotomontaje de Ada Colau y Javier Burón con el Ayuntamiento en el fondo / METRÓPOLI

Información municipal

Colau recupera a su exgerente de Vivienda para apoyar su guerra contra Collboni

Javier Burón presenta libro en Barcelona: propone estrategias que no dieron fruto durante los ocho años en que BeC gobernó la ciudad

Los comunes redoblan la presión sobre Collboni por la vivienda

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Este miércoles, Ada Colau presentaba en Barcelona el libro El problema de la vivienda, de Javier Burón, junto al autor. El subtítulo del libro habla por sí solo: ‘Cómo desactivar la bomba de relojería que amenaza con colapsar España’.

El tema no tendría mayor interés si no fuera por dos detalles que no son una nimiedad: por un lado, Colau vuelve a tomar las riendas de un tema que domina (y que la llevó al sillón de alcaldesa), como el de la vivienda. Por otro, Burón fue la mano derecha de Colau durante ocho años en materia de vivienda durante su etapa en el Ayuntamiento de Barcelona.

Son dos detalles que tienen mucha enjundia interna. Por un lado, Colau aterriza en la política local como presidenta de la Fundación Sentit Comú, el laboratorio de ideas de su partido, Barcelona en Comú (BeC), y lo hace a lo grande, entrando en el terreno de la principal herramienta que los comunes utilizan para desgastar al alcalde de la ciudad, el socialista Jaume Collboni.

Acusaciones contra Collboni

El tema de la vivienda es una constante en las críticas de los comunes hacia Collboni, a quien acusan abiertamente de haberse “vendido” a los lobbies económicos y a quien acusan, malintencionadamente, de no aplicar la norma de obligar a destinar el 30% de obra nueva a alquiler social.

El exgerente de Vivienda de Barcelona, Javier Burón / AJ BCN

El exgerente de Vivienda de Barcelona, Javier Burón / AJ BCN

"En este ensayo, Burón ofrece un análisis detallado de uno de los problemas políticos más importantes que estamos viviendo, el acceso a la vivienda. El libro hace una propuesta integral para que se solucione esta crisis urgente que amenaza la vida de tantas personas”, explicó el partido a sus activistas en una comunicación en la que anunciaba el libro.

Las promesas incumplidas

Lo cierto es que Burón fue, en 2015, el primer gran fichaje de Colau como gerente de Vivienda en Barcelona, cargo que ocupó hasta julio de 2023. Sus recetas, sin embargo, no sirvieron para construir vivienda pública (las promesas de Colau en este sentido fueron siempre incumplidas).

Ada Colau, en un acto de los comunes

Ada Colau, en un acto de los comunes

Con anterioridad, Burón (abogado en el despacho de Cuatrecasas) fue viceconsejero de Vivienda del Gobierno vasco y ahora es director gerente de la empresa pública de suelo industrial, vivienda u cohesión territorial de Navarra (Nasuvinsa). 

Las tesis de los comunes

El exgerente de Colau mantiene la tesis de que la vivienda es inasequible para los jóvenes por políticas públicas deficientes en esta materia y porque se ha enfocado la estrategia de vivienda a usos no residenciales permanentes como consecuencia de fenómenos como el turismo, los nómadas digitales o segundas residencias. 

Estas tesis agradan a los comunes, porque reclama también que el Estado ha de intervenir en el mercado y generar vivienda pública. Otra de sus tesis que agrada a Colau es que es partidario de prohibir la descalificación de las viviendas protegidas.

Comparación con Europa 

La obra que acaba de editar este mes de abril la editorial Arpa, trata de ser una panacea para solucionar el problema. En él, Burón habla de la “nueva vivienda protegida”, pone como ejemplos a seguir las ciudades de Viena o Ámsterdam, o las políticas de vivienda de Francia, Reino Unido o los países escandinavos. Pide también el control de alquileres en zonas de mercado tensionado (“algo muy habitual en Europa”) y el aún más estricto control de los alquileres de temporada.

Su receta pasa por arremeter contra los expats, las segundas residencias o el alquiler turístico. Pero el problema más grave es que apenas hay vivienda oficial o vivienda protegida, a diferencia de otros países europeos, como Francia o Países Bajos.

Lo cierto es que en España sólo hay un 3,4% de vivienda con precios asequibles frente al 8% de la media europea. Los comunes consideran, así (Burón también) que hay demasiada vivienda privada y que se ha de apostar por hacer vivienda pública y alquilar.

Reconoce en el libro que en algunos casos la intervención en el mercado puede vulnerar la ley, pero pide que la izquierda de los comunes y Sumar que estudie bien el tema para promover una campaña.

Intensa campaña 

Sea como fuere, el tema es, hoy por hoy, el principal caballo de batalla de los comunes para quebrar la imagen pública de Collboni. Las últimas actuaciones de los comunes son una intensa campaña entre sus acólitos arrogándose el mérito de haber obligado a pactar al Govern de Salvador Illa a invertir 850 millones de euros anuales para vivienda pública, contratar 100 inspectores antes de acabar el año para vigilar el cumplimiento de los topes de alquileres y la creación de una unidad de antidesahucios.

Unas declaraciones de Janet Sanz, la jefa del grupo municipal de Barcelona en Comú (BeC) extraídas de una entrevista en Betevé y distribuidas a la militancia aseguraban que “cuando estábamos en el gobierno, había desalojos con niños y todos sabían que la alcaldesa Ada Colau se dejaba la piel para que no pasase”.

Pistas sobre las ‘recetas’ de 2027

El libro se presentó un día antes de que se acometiese el desalojo del asentamiento en Vallcarca, lo que fue inmediatamente utilizado por los comunes para cargar contra Collboni: “Es absolutamente intolerable que un alcalde desaloje a familias y a personas vulnerables sin darles ninguna alternativa habitacional. Exigimos a Jaume Collboni que rectifique estas políticas de la miseria que han dejado en la calle a familias sin recursos”, denunció BeC a través de las redes y en sus arengas a la militancia.

La repesca de Burón y su libro para sumar al ataque contra el Ayuntamiento socialista puede dar pistas de por dónde irán las nuevas propuestas que los comunes quieren lanzar de cara a las municipales de 2027.

Uno de los ejes es el oponer las políticas de Colau a las de Collboni y situar a éste en el mismo plano que a las autoridades de Madrid, todas del PP y con estrategias en materia de vivienda radicalmente opuestas a las de Barcelona. Pero otra cosa son las recetas que quieren para Barcelona y que durante ocho años de gobierno de los comunes no dieron ni una alegría a los responsables municipales, ni en el terreno de la oferta inmobiliaria pública ni en el del freno a los desahucios.