El PP carga contra el Ayuntamiento de Barcelona por prohibir las ‘rutas de borrachera’ pero tolerar los botellones

Primeras reacciones al veto, por parte del Ayuntamiento de Barcelona, a las ‘rutas de borrachera’ en la ciudad. El líder del PP, Daniel Sirera, ha reprochado a Collboni que amplíe la restricción, mientras –según él– tolera los que considera los “verdaderos focos de degradación” de la ciudad, como el botellón.

Sirera ha calificado la medida de “cosmética y puramente propagandística”, ya que, a su juicio, señala a la hostelería sin abordar el problema de fondo y sin endurecer la Ordenanza de Civismo.

“En lugar de perseguir fiestas legales en bares con licencia, debería actuar contra quienes destrozan la convivencia en plazas y calles cada noche”, ha sostenido el concejal, quien también ha advertido de que la medida genera dudas sobre su alcance real.

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Prohibición las 24 horas

El Ayuntamiento ha anunciado este miércoles, 6 de agosto, la extensión a toda la ciudad de la prohibición de organizar o promover actividades relacionadas con el consumo de alcohol en establecimientos. Esta medida, que estará vigente las 24 horas del día, tendrá una duración de cuatro años a partir de su entrada en vigor.

Hasta ahora, las rutas de alcohol solo estaban restringidas en los distritos de Ciutat Vella –desde 2012– y del Eixample –desde el 1 de junio de este año–. En ambos casos, los decretos limitaban principalmente su realización en horario nocturno, entre las 19:00 y las 07:00 horas.

Sin embargo, tras detectar que estas actividades se desarrollan durante todo el año, el Ayuntamiento de Barcelona ha decidido ampliar la restricción a las 24 horas del día. El objetivo es garantizar la convivencia ciudadana, proteger el descanso vecinal y salvaguardar la salud pública.

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Molestias vecinales

La actividad, conocida como pub crawling, es una forma de negocio que consiste en promocionar el consumo de alcohol a través de un recorrido por varios establecimientos adheridos a una oferta de precios. Normalmente, existe un promotor encargado de buscar grupos de personas, a quienes concentra en uno de los locales para dar inicio al recorrido.

Este tipo de oferta consiste en consumir una o varias bebidas, generalmente de baja calidad y en un corto periodo de tiempo, para luego continuar hacia el siguiente establecimiento.

Un Mosso d’Esquadra patrullando las calles de Barcelona LUIS MIGUEL AÑÓN (MA)

Debido a sus características, estas prácticas han sido identificadas como un factor de riesgo: generan molestias vecinales, aumentan la presión sobre el espacio público y pueden derivar en infracciones o delitos, especialmente relacionados con la seguridad vial.