La edil Janet Sanz (BComú) junto a la regidora Elisenda Alamany (ERC)
ERC y comunes reiteran su apoyo a las ordenanzas fiscales de Collboni en Barcelona para 2026
El pleno municipal da luz verde a la propuesta tributaria para la ciudad, que obtuvo su primer beneplácito en la Comisión de Economía de octubre a la espera de su aprobación definitiva
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El pleno municipal ha reiterado su apoyo a las ordenanzas fiscales de Barcelona para 2026, con los votos favorables de BComú y ERC, que se han sumado a al propuesta tributaria del PSC tras las concesiones del Ejecutivo local a estas formaciones.
El teniente de alcalde de Economía, Jordi Valls, ha recordado que la propuesta "no impacta en la fiscalidad de las familias", y se centra en la aplicación de una bonificación del 95% sobre el impuesto de construcciones y obras (ICIO) en trabajos de regeneración urbana y en la autoliquidación del impuesto complementario en el momento de finalización de las obras.
La proposición municipal también dota de "mayor solidez jurídica" la Zona Bus 4.0, y apuesta por el incremento del recargo barcelonés en el impuesto turístico.
"Se paga más para recibir menos"
Arnau Vives, edil de Junts, ha señalado que "Barcelona no puede continuar siendo la ciudad donde cada vez se paga más para recibir menos", y ha apuntado que su partido no será "cómplice de un modelo pensado para acabar con la clase media y trabajadora".
Gemma Tarafa, regidora de BComú, ha afirmado que su formación ha visto un "cambio de actitud" del gobierno municipal, y ha celebrado el compromiso del Ejecutivo local para vetar el "alquiler de temporada" y frenar los "desalojos en Vallcarca".
Desde ERC, el concejal Jordi Castellana ha hecho hincapié en el acuerdo para el incremento del "impuesto turístico", que supondrá un ingreso extra de "70 millones de euros" para el Ayuntamiento.
"Fiscalidad de Colau"
El edil popular Juan Milián ha denunciado que "hace tres años que el gobierno de Collboni mantiene la fiscalidad del gobierno de Colau y, con ella, su red parapolítica que condiciona Barcelona", tras lo que ha lamentado el "modelo fiscal improductivo" del Ejecutivo local.
Gonzalo de Oro, líder de Vox en Barcelona, ha justificado su voto en contra alegando que el gobierno municipal "no ha aceptado ni una petición" de su partido.