El Ayuntamiento de Barcelona ha comunicado este miércoles a la Taula contra la Contaminació de l'Aire su propuesta para que, a partir del 1 de diciembre, los vehículos más contaminantes -los que no tienen etiqueta de la DGT- no puedan circular por las calles de la ciudad de las 7.00 a las 20.00 horas en días laborables cuando se decrete un episodio de contaminación.
Así lo ha explicado Janet Sanz, teniente de alcalde de Ecología, quien ha declarado a la prensa que quedarán exentos de la restricción las motocicletas -que todavía no tienen la etiqueta-, vehículos para personas con movilidad reducida, servicios de emergencia, autobuses, servicios esenciales, camiones y furgonetas.
Los camiones y furgonetas han quedado exentos porque, según Janet Sanz, son conscientes de que ciudadanos las necesitan para trabajar, y ha asegurado que la Generalitat y el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) estudian medidas para impulsar el cambio de las flotas y no perjudicar la actividad económica para colectivos que usan estos vehículos.
Sanz ha detallado que la restricción será para toda la ciudad -incluidas las Rondas- excepto a Vallvidrera-Les Planes y la Marina -también la Zona Franca-, y ha avanzado que la restricción afectará a cerca del 17% de los turismos de la ciudad e implicará una reducción del 10% de óxidos de nitrógeno (NOx), un 15% de PM10 y otro 15% de benzopireno.
Ha resaltado que esta propuesta, que debe acabar de concretarse con entidades y expertos, pretende "empezar a trabajar ya en un proyecto transitorio hacia las restricciones permanentes", aplicándolas primero sólo en episodios de contaminación -no ha habido ninguno en lo que va de año-, que son activados por la Generalitat.
Estas restricciones permanentes incluyen que los vehículos más contaminantes no puedan circular a partir de 2019 en 40 municipios del entorno de la capital catalana, como se acordó en una reunión en marzo entre Generalitat, AMB, Ayuntamiento y Diputación de Barcelona.