Un taxista de Barcelona huyó del punto de recogida en el que había quedado con un cliente cuando vio que la persona que tenía que llevar era un hombre ciego que iba acompañado de su perro guía. Los hechos tuvieron lugar el pasado 12 de junio en la capital catalana. La normativa es muy clara: ningún taxista se puede negar a llevar a una persona ciega y a su perro.
La persona invidente, Juanjo Montiel, solicitó un taxi para que lo recogiera a la salida de su trabajo. Juanjo pidió el taxi a través de la aplicación Mytaxi y esperó al vehículo en la esquina. Poco después, el taxista llamó a Juanjo:
"¡Hola! ¿Has pedido un taxi?, le dijo.
"Sí, estoy aquí abajo, seguro que podrás verme. Estoy frente al restaurante de la esquina", contestó.
Tras unos segundos de silencio, Juanjo oyó como un coche arrancaba a toda velocidad. Al poco rato, en su aplicación le apareció el mensaje de que se había cancelado el servicio.
Tras el incidente, el chico publicó un tweet muy indignado: "Esta tarde me ha sucedido algo con un taxista en Barcelona que me tiene muy cabreado y que no es, ni mucho menos, la primera vez que me ocurre. Abro hilo", escribió Juanjo. Asegura que le ha pasado, al menos, una docena de veces. El mensaje en la red social tuvo miles de retuits.
Juano intentó contactar en diversas ocasiones con el conductor para que le diera una explicación pero el taxista no le contestaba a las llamadas. Cuando consiguió hablar con él, se lo quitó de encima haciendo ver que no sabía hablar en castellano.
La reacción de Mytaxi ha sido fulminante. La directora de márketing y comunicación, Sandra Sancho, explica que tras escuchar la versión del conductor y de Juanjo expulsaron al taxista de la aplicación y lo denunciaron ante el Instituto Metropolitano del Taxi, el organismo público que gestiona y controla el funcionamiento de la flota negra y amarilla.
Mytaxi se ha reunido también con Juanjo, el cliente afectado. Sandra explica que buscarán la manera de concienciar a los taxistas inscritos en la aplicación, unos 2.500, para intentar evitar que se repita este tipo de discriminación. "Intentamos dar un servicio de calidad a nuestros clientes. Y eso no solamente pasa por llevar el taxi limpio, sino también que el trato sea correcto en todo momento", dice Sandra.
El Instituto Metropolitano de Taxi afirma que todavía no ha recibido la denuncia de Mytaxi. En el momento que la tenga sobre la mesa, se abrirá al conductor un expediente informativo que, en el caso de comprobarse los hechos denunciados, puede acabar en una sanción para el conductor que puede oscilar entre 250 y 1.250 euros.