Huelga sobre huelga es lo que está viviendo este verano la ciudad condal. Tras el anuncio del paro de los tripulantes de cabina de Ryanair venía el de Iberia y el del personal de AENA. También se suman las huelgas internacionales que podrían afectar al aeropuerto, como la de Ryanair en Irlanda o los continuos paros de los controladores aéreos franceses que afectarían directamente a Barcelona-El Prat.
Por si fuera poco, los taxistas han anunciado un paro de doce horas para el próximo 25 de julio. Un hecho que se solaparía con la huelga de Ryanair, creando grandes problemas para turistas y locales que empiezan o vuelven de sus vacaciones.
CALENDARIO PARA SOBREVIVIR A LAS HUELGAS
La primera huelga será la de los pilotos irlandeses de Ryanair, que tendrá lugar el 20 y el 24 de julio, y que provocará la cancelación de centenares de vuelos. Tal y como han explicado desde la compañía es posible que la huelga de Irlanda afecte a los vuelos de Barcelona con retrasos y alguna cancelación.
Tras los pilotos, vienen los auxiliares de vuelo de la misma compañía el 25 y 26 de julio. Hasta último momento la empresa ha intentado negociar sin éxito con los más de 1.800 trabajadores españoles que exigen que se les aplique la legislación laboral nacional (y no la irlandesa como hace la compañía), entre otras mejoras de las condiciones salariales y laborales así como una reducción de la alta temporalidad. Esta huelga se prevé que afecte a unos 100.000 pasajeros en los dos días de paro previstos.
Dejando atrás Ryanair, el personal de tierra de Iberia está llamado a la huelga los días 27 y 28 de julio y 3 y 4 de agosto. Un paro que coincide con los fines de semana más importantes del año para el turismo internacional.
Por último, la huelga prevista para el 29 de julio del personal de tierra de Aena fue desconvocada la pasada semana, dando así un respiro a un mes negro para el aeropuerto.
Se prevé que las huelgas afecten a 300.000 pasajeros por cancelaciones o retrasos.
¿QUÉ PUEDES RECLAMAR?
Las compañías están obligadas a devolverte el dinero del billete o reubicarte en otro vuelo en caso de cancelación o retraso. Eso sí, en el caso de huelgas en las que el pasajero haya sido informado con más de siete días de antelación de la cancelación de su vuelo la compañía no está obligada a indemnizar a su cliente.
En caso contrario, tal y como reconoció el pasado mes de abril el Tribunal de Justicia de la Unión Europea, si el pasajero cumple con la normativa europea de indemnizaciones, la compañía deberá pagarle entre 250 y 600€.