Ada Colau se quiere cambiar el coche municipal que utiliza para circular por Barcelona. Así lo han asegurado dos fuentes del Ayuntamiento de Barcelona a Metrópoli Abierta. Estos días se ha visto a la alcaldesa moviéndose por la ciudad con, al menos, dos vehículos distintos. El objetivo de Colau es encontrar un turismo menos contaminante que el utilizado hasta ahora, un Seat Alhambra, afirman. Según las fuentes consultadas, Colau ha probado un Peugeot 3008 y un Kia Niro, dos marcas que no guardan ninguna relación con Barcelona, recuerdan desde del sector automovilístico.

El Kia Niro, por ejemplo, estaba aparcado este jueves en la zona de estacionamiento del Ayuntamiento de la plaza de Sant Miquel, detrás de Sant Jaume. Se trata de un crossover híbrido que, a precio de mercado, cuesta entre 20.000 y 35.000 euros, en función del modelo. El Peugeot 3008 es un SUV, que puede ser híbrido, y está a la venta a partir de unos 28.000 euros.

UN COCHE DE SEGURIDAD

Este medio se ha dirigido al departamento de prensa del Ayuntamiento para confirmar si la alcaldesa de Barcelona se quiere cambiar el coche. Un portavoz se ha limitado a decir que el vehículo de Colau cumple con todos los requisitos y que es de seguridad y que no tienen intención de dar detalles sobre un vehículo de seguridad. Al insistir que se trataba de un tema de gasto público, el departamento de prensa de Colau no ha constestado. Tampoco se ha concretado si el vehículo es de renting (alquiler a largo plazo) o de propiedad.

El pasado 4 de enero, Crónica Global avanzó que la alcaldesa de Barcelona se desplaza por la ciudad con un monovolumen de siete plazas que emite un 70% más de CO2 que el límite establecido en la nueva regulación europea sobre emisiones, que entró en vigor el 1 de enero de 2020. El Seat Alhambra que Colau utiliza tiene una potencia mínima de 210 caballos y un consumo en trama urbana de 9,6 litros.

MAYOR CONFIGURACIÓN QUE EL DE SERIE

La normativa europea obliga a fabricar coches que consuman, como máximo, 95 gramos de dióxido de carbono por kilómetro. El consumo de gasolina recomendado por 95 gramos de CO2 es de 4,1 litros por cada 100 kilómetros. La configuración del modelo utilizado por Colau es muy superior al de serie.

El Ayuntamiento tiene, como mínimo, dos Seat Alhambra. Este martes, ambos estaban estacionados en la plaza de Sant Miquel. Según el concejal de Ciudadanos, Paco Sierra, uno es diésel y el otro gasolina. "Los compraron en Sevilla. Son de siete plazas porque querían ir a todas partes en equipo", dice Sierra a este medio.

En 2015, La Vanguardia explicó que Colau decidió jubilar el Audi que había usado el alcalde Xavier Trias -uno de los pocos vehículos que entonces tenía el Ayuntamiento en propiedad- y se decantó por un Seat Alhambra de alquiler. Según el medio del grupo Godó, la mayoría de los coches que tiene el consistorio son de renting. Cuando la edil se cambió el coche, una de las exigencias que puso fue que no tuviera los cristales tintados. En 2018, el periodista Antonio Fernández publicó en Metrópoli Abierta que el coche de la alcaldesa era un renting que supone "un importante desembolso para el consistorio".  

El PP también ha pedido explicaciones a Colau por circular con un coche contaminante. En un tuit publicado el 5 de enero, el concejal Óscar Ramírez preguntó a la líder de Barcelona en Comú si era verdad que "su coche oficial incumple la normativa europea sobre contaminación". Ramírez también interrogó a la primera edil de la ciudad si necesita un siete plazas para moverse por Barcelona. Ni que decir tiene que Colau no contestó.

INVENTARIO DE LA FLOTA MUNICIPAL

Con posterioridad, Ramírez llevó a la comisión de Ecología, Urbanismo, Infraestructuras y Movilidad del pasado enero una proposición para hacer un inventario de la flota de vehículos del Ayuntamiento de Barcelona y los organismos y servicios vinculados para comprobar si cumplen la normativa y la ordenanza de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE). La iniciativa fue aprobada por unanimidad.

En el debate con el concejal de Barcelona en Comú, Eloi Badia, Ramírez sacó el tema del coche contaminante de Colau. Badia no entró al trapo y sin mencionar el monovolumen de Colau subrayó que toda la flota de vehículos municipales tendría que cumplir con la normativa de la ZBE, algo que se sabrá cuando se disponga del inventario, y habría que incentivar el paso hacía turismos lo más eficientes posibles o eléctricos.

AMORTIZACIÓN SENSATA

En cualquier caso, Badia alertó de la necesidad de hacer una "amortización sensata" de vehículos adquiridos recientemente y que puedan funcionar con euro 6 o euro 7 porque cambiarlos por otros de eléctricos podría suponer un gasto extra para las arcas municipales.  

Se da la circunstancia de que Badia tampoco predica con el ejemplo en lo que se refiere a circular con coches no contaminantes. A título personal, el concejal de Emergencia Climática y Transición Ecológica posee una furgoneta Volkswagen altamente contaminante de 1994. En enero dijo que está en trámites de vender el vehículo y que hace un uso ocasional de él. En la declaración de bienes de Badia todavía aparece la citada furgoneta, que el representante público compró en 2011.

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