El Gobierno municipal de Barcelona, liderado por Ada Colau, continúa con su empeño para no ponerle el día a día fácil a los conductores barceloneses. Y lo hace más allá de sus polémicas medidas de urbanismo táctico implantadas en la ciudad.
Desde este mes de abril, los propietarios de vehículos privados deberán abonar el coste del Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM), conocido como impuesto de circulación, una factura especialmente cara en la capital catalana.
El coste del impuesto en Barcelona tan solo lo superan las capitales de provincia del País Vasco, colocándose como el segundo coste más elevado en este sentido y la cuarta ciudad de España con un precio más disparado.
CIUDADES
San Sebastián (86,64 euros), Vitoria (71,45 euros) y Bilbao (69,36 euros), son las únicas ciudades españolas cuyo coste del impuesto es más elevado que en la Ciudad Condal (68,16 euros), como se desprende de un informe publicado por Automovilistas Europeos Asociados (AEA). El valor de referencia se toma para los vehículos con una horquilla de caballos fiscales de entre 8 y 11,99, pero la diferencia de coste es aplicable a otros tipos de vehículos y potencias.
Lejos del coste de Barcelona quedan otras grandes ciudades a nivel nacional, como Madrid (59 euros), Valencia (62,59 euros) y Sevilla (61,78 euros).
Vehículos en la avenida Diagonal / AR
TARIFAS EN BARCELONA
El coste del impuesto de circulación en España lo marcan los municipios, y debe encajar en la horquilla legal establecida. En la capital catalana, la Ordenanza fiscal reguladora del Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica es la que marca los precios vigentes según el tipo de vehículo y otros criterios, como sus caballos fiscales, el número de plazas, su peso o su cilindrada.
Los turismos con menos de ocho caballos fiscales pagarán 25,24 euros, de 8 a 11,99, 68,16 euros; de 12 a 15,99, 143,88 euros; de 16 a 19,99, 179,22 euros; de 20 en adelante, 224 euros. Los autobuses con menos de 21 plazas abonarán 166,60 euros; de 21 a 50 plazas, 237,28 euros; más de 50 plazas, 296,60 euros. Los camiones se clasifican por su carga útil. Así, los que cuentan con menos de 1.000 kilos de carga útil son los que menos pagan (84,56 euros), seguidos de los que van de 1.000 a 2.999 kilos (166,60 euros), de 3.000 a 9.999 kilos (237,28 euros), y más de 9.999 kilos (296,60 euros).
Los tractores se dividen entre menos de 16 caballos fiscales (35,34 euros), de 16 a 25 (55,53 euros), y más de 25 (166,60 euros). Los remolques y semiremolques se clasifican por peso, pagando 35,34 euros aquellos con un peso inferior a 1.000 kilos, 55,53 euros entre 1.000 y 2.999 kilos, y 166,60 euros los superiores a 2.999 kilos. Finalmente, las motocicletas pagan según su cilindrada: ciclomotores y motocicletas hasta 125 centímetros cúbicos (8,84 euros), de 125 a 250 (15,14 euros), de 250 a 500 (30,30 euros), de 500 a 1.000 (60,58 euros) y más de 1.000 (121,16 euros).
A PARTIR DE ABRIL
El pago del impuesto de circulación en 2021 comienza este mes de abril. Entre el 15 de abril y el 17 de junio deberán abonarlo aquellos que no los tengan domiciliado. El abono puede realizarse por internet, teléfono, en las máquinas quiosco instaladas en dependencias municipales y en cajeros automáticos.
Quienes sí dispongan de esta cuota domiciliada, recibirán el cargo en el próximo mes de julio.