El Ayuntamiento de Barcelona ha acabado las obras de reforma de la ronda de la Universitat. De esta forma, la céntrica calle del Eixample se ha pacificado y ha pasado de cuatro carriles de circulación a dos.
Según el Ayuntamiento, la actuación ha permitido corregir la desproporción entre el espacio que había de aceras con el de circulación. Las aceras se han ampliado con plataformas de hormigón, pasando de cinco a casi ocho metros en su conjunto.
INVERSIÓN DE 350.000 EUROS
La proporción actual en la ronda de la Universitat es de un 50% de espacio para los peatones y un 50% de calzada. En total, se han ganado 1.730 metros cuadrados para los desplazamientos a pie. La transformación de la calle ha costado unos 350.000 euros.
La acera del lado montaña ha ganado espacio para los peatones con el cambio de ubicación de 11 de las 15 líneas de bus interurbano que operaban en la zona.