Un peaje de congestón y de contaminación en el área de Barcelona. Es la demanda que ha hecho este martes la asociación Promoció del Transport Públic (PTP), que reabre el debate de un peaje urbano a la entrada de la ciudad para pedir que la medida se implemente, igual que ya se hace en otras capitales europeas como Londres o Estocolmo.
La PTP considera que así se reducirían de forma "muy importante" los viajes en vehículo privado, por lo que mejoraría la calidad del aire y disminuiría la emisión de gases contaminantes. Y es que actualmente se dan 1,65 millones de desplazamientos diarios en coche o moto en la región, de los que el 44% son dentro de la ciudad, convirtiendo al área urbana de Barcelona en la de mayor densidad de vehículos de toda Europa.
VINCULADO A LA ZBE
Además, la plataforma reivindica la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) como el mecanismo que facilitaría la transición hacia este tipo de peaje, que acabaría siendo complementario de la misma. Así plantea que se vinculen ambos instrumentos para aprovechar la tecnología que ya está implantada en la ZBE y que controla a los vehículos.
FINANCIAR EL TRANSPORTE PÚBLICO SOSTENIBLE
"Cualquier vehículo motorizado debería asumir un coste por las externalidades ambientales que genera su circulación. Además, también es factible establecer un tramo variable de la tasa en función de distintos criterios como las horas punta o valle, el distintivo ambiental, la categoría del vehículo o su ocupación, para comentar el uso compartido", expresa la PTP. El dinero recaudado debería servir para financiar el transporte público sostenible, señala la entidad. Igualmente propone bonificaciones y exenciones para personas son dificultades económicas o movilidad reducida.
SIN COMPETENCIAS
Para acabar, la PTP recuerda que los municipios no tienen las competencias para aplicar este tipo de medidas, que se podrían regular con la futura ley estatal de movilidad y financiación del transporte urbano, que todavía debe debatirse en el Congreso de los Diputados. Por todo esto, pide al Ayuntamiento y al Área Metropolitana de Barcelona (AMB) que presione al Gobierno y a la Generalitat en esta línea.