La guerra contra el vehículo privado del gobierno municipal liderado por Ada Colau está siendo especialmente dura en el Raval. En este barrio, las trabas derivadas de cambios urbanísticos y de movilidad no han sido suficiente para la administración local, que decidió ir más allá el pasado mes de enero.
El Ayuntamiento decidió vetar la circulación de los coches entre las 07:00 y las 09:00 horas, así como entre las 14:00 y las 21:00 horas. La finalidad de esta norma, que vino acompañada de cambios de sentido en diversas calles y no gustó nada a los comerciantes, era la priorización de "los desplazamientos a pie y en bicicleta de los vecinos en los horarios de más afluencia".
Meses después de la implantación de esta medida, el ejecutivo local quiere impedir que se produzcan incumplimientos a base de sanciones a los conductores. Para ello, ha aprobado la instalación de un sistema de videovigilancia que controlará el acceso de vehículos a la zona restringida.
MONITORIZACIÓN DEL TRÁFICO
Según indica el proyecto ejecutivo, se implementará un sistema de cámaras "capaz de gestionar el monitoreo y control de las posibles infracciones por acceso a la zona restringida por parte de vehículos no autorizados, por acceder fuera del horario de circulación permitido, o por incumplir los aspectos medioambientales determinados por el Ayuntamiento".
El sistema de captación que se utilizará reducirá al mínimo el margen de error en la lectura de matrículas. Para ello, cada instalación contará con una cámara de alta definición lectora de matrículas en "blanco y negro", una "cámara de entorno a color" y un "sistema de iluminación de largo alcance" que permitirá una correcta captación de imágenes independientemente de cuales sean las condiciones climatológicas y la luz natural de la que se disponga.
Cada cámara tiene capacidad para la lectura de las matrículas de vehículos que pasen por un máximo de dos carriles en el mismo sentido, por lo que la cifra de estos dispositivos en cada nueva instalación dependerá del número de carriles y sentidos a controlar.
UBICACIÓN DE LAS CÁMARAS
Para garantizar el cumplimiento de la prohibición de acceso en coche durante las horas señaladas, que tan solo cuenta con excepciones para residentes, estacionamientos privados y otros autorizados, el Raval dispondrá de ocho puntos de control en los que se instalarán los sistemas de videovigilancia.
Las cámaras se ubicarán en las siguientes confluencias del barrio: La Rambla con calle de Pelai, Gran Via con calle de Pelai, calle de Riera Alta con Ronda de Sant Antoni, calle de la Cera con Ronda de Sant Pau, calle Nou de la Rambla con avenida del Paral·lel y avenida de les Drassanes con calle del Portal de Santa Madrona.
También estarán videovigiladas las confluencias de calle de Montserrat con calle del Portal de Santa Madrona y calle del Tigre con Ronda de Sant Antoni.
COSTE
La implementación de los ocho puntos de control con los dispositivos adecuados para la identificación de vehículos en el Raval, supondrá un coste que ascenderá hasta los 362.686,86 euros.