El Bus Turístic del Maremagnum: alto riesgo de tapones por vehículos demasiado grandes
Los autobuses que TMB adquirió para que circularan por el port Vell tienen grandes problemas de acceso a la zona portuaria
26 febrero, 2023 00:00Noticias relacionadas
Chapuza municipal. La parada de El Maremagnum de Barcelona del autobús turístico es, desde 2017, muy problemática. Para llegar a la estación, hay que pasar por una serie de túneles y vados que, debido a un problema con las medidas de los últimos 20 vehículos incorporados a la flota, existe un alto riesgo de atasco y tapones. Los autobuses, literalmente, no caben por los túneles y ni pueden subir los vados de acceso al port Vell. Solo los conductores de mayor experiencia del servicio pueden transitar la zona con unos vehículos de tres ejes que consiguen pasar llevando al máximo la suspensión.
Según ha informado a Metrópoli la Coordinadora Obrera Sindical d'autobusos de TMB, los vehículos problemáticos se adquirieron en 2016. Se trata, concretamente, de dos lotes de 10 buses turísticos cada uno que, por su tamaño, resultan demasiado altos y largos como para poder atravesar los obstáculos de la zona con solvencia.
Lo que ya fue una chapuza, como la adquisición de 10 de estos vehículos sin tener en cuenta las medidas de los obstáculos de la ruta, se ha solucionado con otra chapuza todavía mayor, que es eliminar temporalmente la parada de Bus Turístic de la zona y, una vez restablecida, delegar la responsabilidad en la habilidad de los conductores. A su vez, la ruta sigue operativa con autobuses antiguos, mientras que los nuevos operan en otra ruta. Ya en 2016, cuando los propios trabajadores notificaron los problemas de acceso, desde TMB se comprometieron a "modificar los vehículos" para que cupieran. A finales de febrero de 2023, no solo no se han hecho las modificaciones, sino que tampoco se esperan.
6,5 MILLONES
"Nadie asume el error" se queja el sindicato, que ve paralelismos entre lo ocurrido en TMB con los trenes de Renfe de Asturias y Cantabria, una problemática que se ha saldado con las dimisiones del presidente de Renfe, Isaías Táboas, y la secretaria de Estado de Transportes y expresidenta de Adif, Isabel Pardo de Vera. Mientras tanto, el Maremagnum continúa con una parada que funciona a base de parches.
Los autobuses, siempre según el sindicato, continúan también en funcionamiento por la ciudad. En total, la marca Bus Turístic, operada por Turisme de Barcelona y por TMB, gastó un total de 3,1 millones de euros en la flotilla, a razón de 309.540 euros por vehículo y otros 3,44 millones de euros en la segunda flotilla de refuerzo, a raíz de 344.000 euros por vehículo. Este último lote, explican, no ha dado problemas porque desde un principio opera en una ruta diferente y no pasa por el Maremagnum.
El monto total invertido asciende, aproximadamente, a los 6,5 millones de euros por 20 vehículos que han pasado a renovar el total de la flota, compuesta por algo más de 70 autobuses.
LOS VEHÍCULOS
La primera de las adquisiciones fue de un total de 10 autobuses turísticos de la marca Volvo y carrozados por la empresa Sercar. Según la documentación oficial de TMB, se trata de vehículos de tres ejes, con motor Volvo D8K 350 cv. diésel. En cuanto a las medidas, tienen una longitud total de 14 metros, una altura de cuatro metros y una anchura total de 2,55 metros.
El segundo lote adquirido, a razón de 344.000 euros por autobús, eran vehículos de la marca Mercedes y carrozados por Ayats. Estos tienen una longitud de 13,2 metros, una altura de cuatro metros y anchura de 2,55 metros. Son también vehículos de tres ejes con motor Dailmer AJ que funciona con diésel.
OTROS PROBLEMAS
El tamaño no fue el único problema que dieron los Volvo-Sercar. Escasas semanas después de entrar en funcionamiento, a Bus Turístic le empezaron a llegar quejas de inundaciones de los autobuses. En concreto, en días de lluvia el agua se colaba por la junta del aire acondicionado y por el sellado del primer y segundo piso de los vehículos. Según han relatado a este digital, tal era la cantidad de agua que el suelo de los autobuses llegaba a encharcarse. Ante las quejas de turistas y trabajadores, TMB decidió añadir unas persianas con el fin de frenar el paso del agua.
Asimismo, los empleados también denunciaron que los vehículos tenían una baja visibilidad tanto para el conductor como para el guía. Dicho de otra manera, el conductor de los autobuses, al conducir, no podía ver bien. En la misma línea, recomiendan a los turistas que suban solo al piso de arriba pues, al ser tan bajo el techo, todo turista que se siente abajo tendría problemas para ver cualquier monumento.
Con todo, los 20 vehículos adquiridos continúan operando en la ruta norte o 'línea azul', que pasa por la plaza de Catalunya, el MACBA, el paseo de Gràcia, la Sagrada Família, el parque Güell y sube hasta el Tibidabo, Pedralbes y el Camp Nou. La ruta roja, o sur, en la que se encontraba la parada del Maremagnum, continúa operando con buses de la antigua flota.
Al término de este artículo, Bus Turístic no ha respondido a las preguntas formuladas por Metrópoli.