Las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) continúan extendiéndose por Europa. En el caso de Barcelona, y tras un periplo judicial en el que finalmente la Comisión Europea ha mostrado su apoyo a las restricciones, cada vez más conductores del ámbito metropolitano se ven afectados por la normativa.
A escala continental, las grandes ciudades han establecido sus propias ZBE, haciendo uso de diferentes criterios de clasificación para los vehículos e, incluso, aplicando medidas adicionales para disuadir a los automóviles de estas urbes.
Madrid (España)
Con la consolidación del plan Madrid 360, la capital española cuenta con un modelo para sus 21 distritos que prohíbe, desde el pasado mes de enero, la circulación de los vehículos sin distintivo ambiental en su ZBE, dotando de protección especial al distrito Centro.
A diferencia de Barcelona, Madrid ha impulsado un plan con ayudas económicas que oscilan entre los 1.500 y los 5.500 euros para la compra de vehículos menos contaminantes.
Lisboa (Portugal)
La capital portuguesa cuenta con una ZBE dividida en dos zonas. La primera afecta al centro histórico de Lisboa y permite la entrada de vehículos que cumplan con la normativa Euro 3 y posteriores.
La segunda zona, de mayor alcance, rebaja las exigencias al requerir un estándar mínimo Euro 2. En ambos casos, las restricciones se aplican los días laborables, de 07.00 a 21.00 horas.
París (Francia)
El modelo de París tiene notables similitudes con el de Barcelona, especialmente por la afectación geográfica metropolitana que se aplica en la Île-de-France. En la propia ciudad, la regulación es más dura, con la obligación de circular con el correspondiente distintivo ambiental.
Indicador de Zona de Bajas Emisiones en Francia
Las restricciones se aplican entre las 08.00 y las 20.00 horas en días laborables. Los vehículos de gasolina que circulen en la capital francesa deberán cumplir el requisito mínimo de la norma Euro 4, y Euro 5 en caso de los diésel, a los que les corresponde la etiqueta Crit'Air 2.
A día de hoy, el futuro de esta ZBE está en cuestión después de que la Asamblea Nacional derogara el pasado mes de mayo la normativa a nivel estatal, tras ser considerada clasista por la mayoría de diputados franceses.
Milán (Italia)
En Milán, con un horario de 07.30 a 19.30 horas los días laborables, existen dos áreas de restricción. El área B, de mayor alcance, permite el acceso a vehículos acorde, al menos, con la normativa Euro 5.
En el área C se añade el pago de un peaje urbano. Aquellos que quieran acceder al centro histórico de la ciudad con su automóvil deberán abonar 7,50 euros de autorización diaria. Con esta licencia, el acceso y salida de la ciudad es ilimitado durante 24 horas.
Múnich (Alemania)
La ciudad alemana permite la circulación de vehículos diésel Euro 5 y gasolina Euro 1, siempre y cuando estos últimos cuenten con un convertidor catalítico que pueda facilitarles el distintivo ambiental verde.
Distintivo ambiental alemán
Las restricciones en Múnich son permanentes, aplicándose todos los días en horario completo, y el adhesivo debe ser visible en el parabrisas de forma obligatoria.
Londres (Inglaterra)
La capital inglesa cuenta con una ZBE que se aplica de forma permanente y que obliga a las furgonetas a cumplir con una normativa mínima de Euro 3 mientras que, en el caso de camiones, autobuses y otros vehículos pesados, es de Euro 6.
Londres dispone de una zona de ultra bajas emisiones en el centro de la ciudad, que tan solo deja de aplicarse en el día de Navidad.
Indicador de zona de ultra bajas emisiones en Londres
La entrada en este ámbito conlleva el pago de un peaje urbano de 12,50 libras diarias, y requiere que el automóvil que acceda cumpla con la regulación Euro 4 y Euro 6 en automóviles gasolina y diésel respectivamente.
Copenhague (Dinamarca)
En Copenhague, las restricciones afectan a los vehículos diésel, a los que obligan a contar con una normativa mínima Euro 6.
Estas limitaciones son de carácter permanente, y no contemplan discriminaciones diarias u horarias.