Joan Baltà, director de Barcelona Sagrera Alta Velocitat: "La futura estación será la nueva plaza Catalunya a escala europea"

Hace tres décadas nació el proyecto ferroviario más ambicioso de la historia de Catalunya. Al margen de Sants, en funcionamiento desde 1975, se forjó la necesidad de construir la estación más importante en la zona de Barcelona con más margen de crecimiento: La Sagrera.

A caballo entre los distritos de Sant Martí y Sant Andreu --sobre todo en terrenos de este último--, una superficie equivalente a la localidad de Martorell se está convirtiendo en "una ciudad dentro de una ciudad".

El espacio, en obras desde hace 15 años, acogerá la estación de La Sagrera y, a su alrededor, se levantarán unas 10.000 viviendas y muchos otros servicios que harán de la zona una nueva centralidad de Barcelona. 

Estado de las obras este noviembre Cedida a Metrópoli

A los mandos de este ambicioso proyecto se encuentra Joan Baltà, director de La Sagrera Alta Velocitat --compañía en la que concurren tres Administraciones públicas: la del Estado, la autonómica y la municipal--. Esta sociedad es la encargada de coordinar la transformación y asumir aquellas obras y redacciones de proyectos necesarios para materializar la futura estación.

En conversación con este digital, el ingeniero de formación remarca la complejidad de la obra y la dificultad de poner fecha a la puesta en marcha del espacio, que se realizará en distintas fases.

En la siguiente entrevista con Metrópoli, Baltà repasa las últimas actualizaciones de la nueva estación de metro --a la que llegarán tres líneas--, el plan de movilidad para garantizar los accesos alrededor del espacio o la inversión total de la obra, entre muchas otras cuestiones.

¿El proyecto de La Sagrera nace con la idea de crear una ciudad alrededor de la estación?

Este proyecto se trabaja desde hace más de 30 años, justo después de los Juegos Olímpicos, bajo la idea de hacer ciudad. Estamos a más de tres kilómetros de la costa, pero hace 20.000 años todo esto era mar. Ahora es un delta en el que se ha generado un desnivel de diez metros entre Sant Martí y La Sagrera, que históricamente ha servido para albergar infraestructuras.

En el siglo XIX se instaló la línea ferroviaria, y en el XXI la de Alta Velocidad. Esta operación prevé la cobertura y unificación de este espacio. En la estación que estamos haciendo se ha liberado espacio donde se edificarán viviendas, oficinas y hoteles.

¿Cuándo finalizará la obra ferroviaria?

Adif está haciendo la estructura de hormigón de la estación, con finalización prevista para finales de 2026, pero aún no estarán acabadas las instalaciones y la arquitectura que se necesitan para que se abra al público.

¿Se ha establecido una fecha para esta apertura?

Lo anunciará el Ministerio de Transportes. A nosotros se nos ha encargado un proyecto de unos 350 millones de euros, con un plan de obra que posiblemente se hará en seis años, aunque es un objetivo muy ambicioso. La totalidad de la estación habrá costado más de 1.000 millones.

Joan Baltà, director de Barcelona Sagrera Alta Velocitat, durante la entrevista con Metrópoli SIMÓN SÁNCHEZ Barcelona

La estación vendrá acompañada de una gran transformación en todo el ámbito de La Sagrera, con especial dedicación en la citada construcción de vivienda. ¿Cuántos pisos se construirán?

Unas 10.000 viviendas. El planeamiento fija los metros cuadrados de techo que se podrán construir, que se dividen para establecer un número de pisos aproximado. Se ha desarrollado entre el 16% y el 20% del total.

¿Las instalaciones cumplirán con la estimación de acoger 100 millones de pasajeros entre Alta Velocidad, Rodalies, metro y autobuses?

Es una previsión de uso variable. La Sagrera empezará con menos viajeros, como es lógico, pero se incrementarán con el paso de los años. Los 100 millones de viajeros representan la capacidad de la estación, que es subterránea y, por lo tanto, no ampliable más allá de incrementar la explotación ferroviaria.

Render de la futura estación de La Sagrera Cedida a Metrópoli

Una vez esté operativa la estación de La Sagrera, ¿cuál será la repartición con Sants? 

Centrándonos en la Alta Velocidad, Barcelona tendrá dos estaciones 'pasantes'; Sants –al sur– y Sagrera –al norte–. Todos los servicios que tengan su origen y final en Barcelona, pararán en Sants y acabarán en la Sagrera, o al revés, iniciarán viaje en Sagrera, pararán en Sants y continuarán.

A ambas estaciones se les prestará servicio con todos los trenes. Actualmente, hay más trenes hacia el interior peninsular que hacia el norte de Europa, pero un día puede llegar a cambiar. Por lo tanto, Sagrera será la terminal de muchos más trenes.

Tendremos un servicio ferroviario que sirve a la ciudad en dos puntos y es el ciudadano el que decide a qué estación se dirige. 

¿La Sagrera será la estación de referencia en Alta Velocidad? 

Sí. La estación de la Sagrera será un servicio de todo un área metropolitana e, incluso, de una gran parte de Catalunya.

Por ello, una de las cosas que estamos construyendo son unos túneles que, desde el nudo de la Trinitat, permita a los coches llegar al parking de La Sagrera sin molestar en la ciudad. Esto también permitirá que los autobuses lleguen a la estación sin complicaciones.

Joan Baltà, director de Barcelona Sagrera Alta Velocitat, durante la entrevista con Metrópoli SIMÓN SÁNCHEZ Barcelona

¿Será, entonces, el punto de la ciudad con mayor accesibilidad en transporte público? 

En estos momentos, a todo el mundo se le ocurriría decir que este punto es la plaza Catalunya: confluyen los Ferrocarriles de la Generalitat, Rodalies, metro… 

Nosotros estamos haciendo un punto de alta accesibilidad, pero a mayor escala: La Sagrera será la nueva plaza Catalunya a escala europea.

¿Cómo se adaptará el entorno para justificar este concepto?

Más allá de la construcción de vivienda, en los alrededores de la estación está prevista la edificación de grandes edificios: hoteles, hospitales… Atraerán a un público europeo.

Render de la futura estación de La Sagrera Cedida a Metrópoli

El servicio de Rodalies está señalado por las incidencias y retrasos de los últimos años. ¿Qué supondrá la existencia de una nueva estación para este servicio?

Es cierto que todas las vías, carriles y la electrificación serán totalmente nuevos. Eso significa que habrá menos averías en ese tramo. Aun así, al añadir una parada más, habrá usuarios a los que se le sumarán dos minutos de viaje. No obstante, para los que necesiten realizar conexiones a través de La Sagrera será una mejora muy notable. 

Se anunció que los accesos al metro de la L4, la L9 y la L10, con una nueva estación (Sagrera-TAV) estarán listos en 2027. ¿Cree que es viable mantener esa fecha? 

Sí, eso es lo que dice la Generalitat. La línea 9 y la línea 10 ya funcionan en la horquilla norte y en la sur, falta el tramo central. En la horquilla norte, el metro acaba en Sagrera-Meridiana y pasa por lo que será la futura estación, pero obviamente todavía no realiza parada. De la línea 4 ya hay también un tramo construido. Ya estamos preparando el entorno, ya que hay que acondicionar la calle que va a recibir las entradas y salidas de esta estación. 

¿La parada de metro estará conectada con la Alta Velocidad?

Sí, la boca de metro estará al lado de la estación de Alta Velocidad y los vestíbulos estarán completamente conectados por debajo, incluso más que en Sants: será todavía más directa y de acceso más rápido. 

Joan Baltà, director de Barcelona Sagrera Alta Velocitat, durante la entrevista con Metrópoli SIMÓN SÁNCHEZ Barcelona

¿Habrá una parada de autobuses dentro de la estación?

Sí, pero solo para autobuses interurbanos. Obviamente, los urbanos pararán a escasos metros, pero la estación está pensada para dar servicio a todas las ciudades del área metropolitana y de la Catalunya interior, entre otras.

Para ir al aeropuerto, la Generalitat ha pactado con ADIF establecer unos servicios de lanzadera hasta la estación de Sant Andreu –la antigua Sant Andreu Comtal--. Cuando La Sagrera TAV esté operativa, también hará parada en la estación, por lo que la conectividad será total. 

La Sagrera lleva 15 años en obras y las asociaciones vecinales se han quejado en múltiples ocasiones por las molestias en su día a día. ¿Existe una comunicación con estos colectivos para llegar a acuerdos? 

Sí, he tenido decenas de reuniones con vecinos y es un diálogo que se canaliza desde el Ayuntamiento de Barcelona, sobre todo a través de los distritos de Sant Martí y Sant Andreu. 

Desde el distrito se tienen que dar explicaciones y llegar a puntos de entendimiento. De hecho, el próximo 2 de diciembre se va a trasladar una hormigonera que producía molestias a los residentes de uno de los nuevos bloques de pisos que ya se ha construido en el entorno.

Joan Baltà, director de Barcelona Sagrera Alta Velocitat, junto a imágenes del proyecto en las instalaciones de la compañía SIMÓN SÁNCHEZ Barcelona

¿Se ha perfilado un plan de movilidad para garantizar la integración de todos los modos de transporte? 

Sí, como en todo plan urbanístico. Por eso comentaba la necesidad de instalar los túneles subterráneos, para garantizar la movilidad de los viajeros sin ocupar espacio de la “nueva ciudad” que se construirá por encima. Hay que tener en cuenta que habrá unos 25.000 vecinos nuevos, con unos 10.000 pisos más, que necesitan tener infraestructuras para su movilidad diaria, que va más allá de la estación de Alta Velocidad.