Local que podría acoger una discoteca en Porta
Los vecinos ganan la batalla contra la polémica discoteca de Porta: Nou Barris paraliza las obras
- El distrito ha rechazado la comunicación de obras que habían realizado los propietarios y ha reclamado que se tramite una licencia de obras mayores, lo que puede alargar el proceso de apertura
- Los vecinos de Porta rechazan la apertura de una discoteca: “Queremos evitar el vandalismo”
Freno a las obras de la polémica discoteca de Porta. El distrito de Nou Barris ha paralizado los trabajos de reforma que los propietarios querían llevar a cabo en el local situado en la calle Pintor Alsamora 75.
Los propietarios habían presentado un comunicado de obras el pasado 16 de diciembre para iniciar las tareas de remodelación y puesta a punto del local con el objetivo de iniciar su actividad en pocas semanas, según ha adelantado 'El Periódico'.
Ahora, el distrito ha analizado el caso y ha considerado que se debe presentar una licencia de obras mayores, por lo que no ha autorizado a los trabajos de reforma. Los propietarios deberán tramitar el nuevo permiso, lo que puede alargar la prevista apertura algunos meses.
Carteles vecinales contra la discoteca
El porcentaje de metros afectados
Según ha informado el mismo medio que ha adelantado la información, el distrito ha dejado sin efecto la comunicación de obras amparándose en el porcentaje de metros cuadrados que están afectados por la reforma. En este caso, el local para la nueva discoteca, que acogía un supermercado de la compañía Dia, cuenta con una superficie de 1.050 metros cuadrados.
El consistorio informó a Metrópoli de que había recibido una solicitud para abrir un local con una actividad de sala de fiestas con espectáculo y restaurante. Aunque no detalló el estado del trámite, sí que aseguró que el solicitante debía presentar la certificación de una entidad de control ambiental. Eso sí, el consistorio ya advirtió de que si se cumplían las condiciones no podían oponerse a su apertura.
Cartel del antiguo Heron City
Oposición vecinal
El nuevo establecimiento contaba con la oposición de los vecinos del barrio de Porta, que veían en la discoteca una amenaza a la tranquilidad de la zona. Ubicada en el corazón residencial, los residentes temían que volvieran a repetirse los hechos de 2009.
En aquel momento, varios locales de ocio nocturno ubicados en el antiguo centro comercial Heron City, conocido a día de hoy como SOM Multiespai, se convirtieron en el escenario de continuos altercados, por lo que el consistorio fue revocando las licencias de forma progresiva y clausurando los locales.
