“La prensa no es usted ni soy yo ni las docenas de periodistas madrileños con sus nombres propios e inalienables: es una fuerza histórica elemental y tremenda, sobre la cual tenemos que meditar todos, usted y yo, los periodistas madrileños y los ciudadanos de todas las naciones.”, escribió José Ortega y Gasset en 1930.
Lo mismo puede decirse de todos los políticos, empresarios, intelectuales, periodistas y personalidades que han participado en la tercera edición de las jornadas BCN Desperta, que organizan los medios Crónica Global, Metrópoli Abierta y El Español.
Los asuntos tratados, meditados y dialogados son vitales para la Barcelona y la Catalunya civilizadas. Las que despiertan de la pesadilla provocada por Ada Colau, los responsables de un desvarío llamado proceso y sus medios de propaganda sumisos.
Un encuentro de esta calidad y categoría hace honor a la filosofía de Aristóteles, que sentenció que el bien general es superior al bien particular. Así lo han practicado los participantes, pensando en el bien general y en los bienes particulares que representan.
Porque ya se sabe que cuando todo parece tambalearse, hay que refugiarse en los clásicos. Que nunca fallan. Y en su relectura, que permite viajar. De paso, se recuerda que nadie se baña dos veces en el mismo Besòs ni en el mismo Llobregat.
Nada de lo que realmente afecta a la ciudad y a la ciudadanía ha quedado al margen: vivienda, seguridad, economía, migración, servicios, cultura, impuestos, burocracia, área metropolitana, la Gran Barcelona, Generalitat, Catalunya…
Todos de acuerdo en coordinar, colaborar e interactuar. Otro asunto es cómo conseguirlo. Aunque a veces sea más incómodo cortar una amistad fingida que continuarla. No sea que se recortase aquello de que els catalans de les pedres en fan pans.
O lo de tant si la bossa sona como si no sona, Barcelona és bona. Tópicos, ya se sabe, pero como todo tópico tiene un fondo de realidad, los participantes en el BCN Desperta han señalado senderos por los que conviene transitar.
Otra cosa agradable de las tres jornadas es que no se ha repetido hasta el hartazgo ni con ira la palabra solidaridad. Porque estos mismos días se ha verificado, otra vez, que en Barcelona hay quienes se llaman solidarios y viven a costa de los demás.
Organizar el BCN Desperta consolida la idea de que, para reactivar y estimular a una sociedad, no hay mejor espuela que un medio de comunicación. Ya que cuando Barcelona iba por el camino de la decadencia, la sensación de incertidumbre asfixiaba.
Sin embargo, este Grupo Global y quienes en él confiaron y confían han mantenido la cabeza tranquila en tiempos complicados. Hundiendo la mano en 15 años atrás de la memoria, se confirma que la verdad necesita tiempo, pero acaba por aparecer.
En cuanto al despertar de Barcelona, es aconsejable hacerlo como decían los sabios latinos. Festina lente, que significa: Date prisa lentamente y Afanya’t poc a poc.
Como banda sonora, Good Vibrations, de The Beach Boys.