Tremenda indignación entre los responsables de la Federación Catalana de Locales Nocturnos (Fecalon) por la decisión de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, de cerrar varios locales de la zona de la Vila Olímpica. El cierre, según la federación, afectará a decenas de familias ya que serán muchos los trabajadores que acabarán engrosando las listas del paro.
El secretario general de la federación, Fernando Martínez, ha asegurado que está decisión es “inadmisible” y que “no le va salir gratis” a la alcaldesa. Además, ha calificado como ocurrencia caprichosa e injustificable la medida adoptada desde el consistorio.
PROBLEMAS DE SEGURIDAD
Desde la organización se han mostrado dispuestos a adoptar todas las medidas a su alcance para impedir que la alcaldesa se salga con la suya. Y no dan como válida la argumentación hecha por la regidora del distrito de Ciutat Vella, Gala Pin, de que en los locales haya problemas de seguridad. “Hay un altísimo nivel de exigencia”, argumenta.
La federación afirma que si hay problemas de inseguridad ciudadana en el exterior de los locales “es un asunto que no se puede atribuir a los locales, sino a cuestiones relacionadas con las políticas públicas de seguridad ciudadana”, acusa.
El cierre de los locales nocturnos vulnera, según los responsables de Fecalon, “derechos administrativos y civiles adquiridos”.