“Mira esa puta, se ha liado con tres tíos”
Una exposición en el Espai Jove de Garcilaso recoge el micromachismo que convive en los hogares y se suele disfrazar de “broma”
19 marzo, 2017 22:44El machismo no solo se resume en la violencia física. Machismo también son actos y expresiones. Aunque muchos lo maquillen con la frase “no son insultos, son bromas”, el lenguaje cotidiano de muchos hombres (y mujeres) está impregnado de micromachismos. Ahora, una exposición en el Espai Jove Garcilaso, organizada por la artista y presidenta de la Associació d'Art i Artesania de la Fabrik, Maria Mata, lo pone sobre la mesa.
“Nena, cuándo vas a hacer la cena”, “¿quién te va a tocar si no te toco yo?” o “mira esa puta, se ha liado con tres tíos”, son expresiones fáciles de escuchar en el día a día. Comentarios tolerados por la mayor parte de la sociedad, pero que esconden en su trasfondo una actitud patriarcal. Maria Mata los ha trasladado a una simulación de hogar, con comedor, cocina y dos habitaciones: una de matrimonio y otra de adolescente. Sobre los muebles y objetos que completan cada estancia: vendajes y frases. “Tenía claro que las había de escribir e ilustrar en vendas, porque son heridas”, explica Mata con tono serio.
LA MICROVIOLENCIA AUMENTA ENTRE LOS JÓVENES
Que la exposición se presente en un espacio utilizado habitualmente por adolescentes no es casualidad. “Pensamos que es importantísimo que los malos tratos machistas se compartan y se conozcan entre las personas jóvenes”, comenta la regidora del Districte de Sant Andreu, Carmen Andrés. “Se sabe por los datos estadísticos que hay muchas jóvenes que están consintiendo la microviolencia y el micromachismo sin darle importancia, y eso en escalada se puede convertir en violencia machista y un sin-vivir para muchas de ellas”, incide.
Una conversación de whatsapp entre un chico y una chica que son pareja ilustra el micromachismo digital (o de redes sociales): Qué haces esta noche... Qué vas a llevar puesto... Envíame una foto... No me gusta eso que te has puesto. “Aún estamos aquí”, lamenta la comisaria, quien no se sorprende que todavía existan los estereotipos de género entre la gente joven “porque es una cosa que todavía no se ha trabajado bien”, reflexiona. “La violencia explícita sí que esta castigada, por lo que se ha desarrollado más la psicológica”, señala.
RELACIONES PATRIARCALES
“En mi entorno lo veía en todas partes, estaba presente constantemente”, explica Jessica, alumna de 4º de la ESO en el Institut Salvador Espriu. Ella misma es testimonio de una relación impregnada de machismo: “Tengo una amiga que su novio es muy sobre protector y si él dice que se ha de hacer algo, se hace; si ella ha quedado con sus amigas y el no quiere, queda con él”, narra. Y de hecho, confiesa que intentará traerla hasta la exposición para que abra los ojos, ya que “vive en su mundo y no se entera de nada; para mi que soy su amiga es muy duro”.
Roger (compañero de clase de Maria), también admite sentirse “impactado” por todo lo leído. “Hay muchas frases que están normalizadas, aunque cuando las ves expuestas te conmocionan; incluso me han puesto de mala hostia, porque las sientes todos los días y la gente no hace nada para romper con ellas”, señala el estudiante. ¿Uno de los escenarios más habituales? El campo de las relaciones sexuales. “Yo no entiendo porque se tiene que juzgar a una persona por el número de personas con las que se ha liado o se ha llevado a la cama”, cuestiona.
¿LA RESPONSABILIDAD? DE LOS PADRES
Si el triunfador es un hombre: todo un macho; si es una mujer: una puta. ¿Cómo frenar la dinámica? La respuesta se halla “más que entre la gente joven, en la forma que educan los padres a sus hijos”, considera Roger. Un origen que también comparte su profesora de artes visuales y plásticas, Blanca Botor: “Si la familia se implica, hace hincapié y es muy meticulosa, se nota”, destaca. “Principalmente porque el alumno cuida las formas" Aún así, Botor lamenta que se vean jóvenes "que intentan salirse un poco del rol de los micromachismos, pero se encuentran demasiado atrapados”, asegura. En su opinión, “es al género femenino” al que más le cuesta escapar de la dinámica.
Carmen Andrés ya ha asegurado que la intención del Ayuntamiento es que la exposición viaje por los distintos institutos y centros cívicos del distrito. Tal como observa la regidora, “es una forma muy gráfica de ver y sentir lo que sienten y viven estas mujeres”. El título de la exposición lo dice todo: 'En defensa propia'. La misma muestra nace y ha sido creada en el seno de un grupo de mujeres en situación de riesgo. “Ellas la han hecho posible para curarse”, descubre la organizadora y sopesa con gratitud que "si puedo conseguir que no se insulten a más mujeres o no se mate a alguna, ya habré hecho algo".