Metrópoli Abierta publicaba el pasado 1 de septiembre una información sobre la degradación de la masía y los jardines de Can Miralletes, en el barrio del Camp del Arpa del Clot. El parque está lleno de suciedad y es un foco habitual de botellón. También hay ratas y personas sintecho. Can Miralletes es uno de los 159 espacios exteriores cedidos por el gobierno de Ada Colau a los colegios para usos educativos para hacer frente a la pandemia. El lamentable estado del parque impide a la escuela Miralletes utilizar la zona.
La directora de la escuela, Eva Cuesta, explica que, de momento, no se ha podido hacer uso del parque. "Hay ratas y personas viviendo", comenta. El centro educativo Miralletes se encuentra en la calle de la Indústria, pegado al parque. "Nos gustaría utilizar los jardines como patio, pero tal como está ahora es imposible". La escuela ya ha trasladado la queja al Ayuntamiento. El pasado martes, la comisionada de Educación, Maria Truñó, visitó el centro y dijo a la directora que se buscaría una solución.
"VERGÜENZA"
La Asociación de Familias de Alumnos (AFA) considera que el estado del parque es una "vergüenza", ha expresado en Facebook. "¿Habéis visto en qué condiciones cede un espacio público a la escuela Miralletes el Ayuntamiento?", pregunta el AFA. "Es un espacio verde con parques infantiles que ahora está lleno de suciedad acumulada. Pedimos soluciones inmediatas. Es un problema de salud pública".
"No se puede ceder un espacio en unas condiciones tan lamentables. Es una vergüenza", denuncia la consejera de Ciutadans en el distrito de Sant Martí, Maria Eugenia Angulo. El partido naranja ha presentado en distintas ocasiones varias proposiciones para que se adecue la zona y se mejore la accesibilidad". Angulo recuerda que el consistorio anunció que recuperaría la masía como ludoteca, pero el proyecto no se ha materializado. La masía sigue tapiada y llena de grafitis.
PROYECTO SIN FECHA NI PRESUPUESTO
Ahora, tres años después de lo previsto, parece que el Ayuntamiento se ha empezado a mover para reformar el edificio. El pasado julio, el consistorio sacó a licitación los servicios de redacción del proyecto y la posible dirección de las obras de mejora y adecuación de la masía por valor de 13.489,17 euros, IVA incluido. Muy probablemente, los usos no serán de ludoteca. Fuentes municipales indican que se pactarán con los vecinos.
El vocal de Urbanismo de la asociación de vecinos del Clot-Camp de l'Arpa, Miquel Catasús, dice que la entidad quiere un bar y lavabos en la planta baja para las personas que hacen uso del parque, y que el primer piso se destine a equipamiento para las entidades juveniles del barrio. "El edificio es demasiado pequeño para albergar una ludoteca", subraya el representante vecinal. La propuesta no tiene ni calendario ni presupuesto.