Desde este lunes, uno de los cuatro mosaicos que adornaba un pasadizo entre la rambla Prim y la calle Camp d'Arriassa del barrio de La Verneda i la Pau está totalmente destrozado. Había permanecido ahí desde 1962, pero el pasado 26 de abril unos paletas lo arrancaron y echaron los pedazos a un contenedor de escombros. Dos días después, Armand Olivé Milian, el artista que lo diseñó, se ha desplazado hasta el lugar para evaluar los daños, y ha sentenciado que su obra es irrecuperable.
Así quedó el mural de Armand Olivé Milian / ASSOCIACIÓ VEÏNS VERNEDA ALTA
En una entrevista en betevé, Olivé Milian ha señalado que al mosaico le faltan cuatro metros cuadrados que estaban hechos con una teselas que ya no se fabrican, por lo que es imposible restaurarlo por completo. "Este material hace 40 años que no existe", ha explicado en la televisión pública local. Así que se ha ofrecido para hacer uno nuevo, de forma totalmente gratuita y a pesar de estar ya retirado: "Haré otras propuestas y veré si les gustan a los vecinos. Tengo que hacer un boceto, presentarlo y, si están de acuerdo, se puede hacer".
Los restos del mosaico que algunos vecinos lograron recuperar del contenedor están ahora en el Centre d'Estudis Sant Martí de Provençals. Ahí los acumularon con la previsión de que Olivé Milian los necesitase para su restauración. Aunque ahora que el artista ha determinado que no podrá arreglarlo deberán decididir qué hacer con ellos. De todos modos, desde la entidad, su presidenta, Arantxa Morán, declara que estarán igualmente "contentos de tener una nueva obra en el caso que no se pueda restituir" la anterior.
Vecinos buscan restos del mosaico de Armand Olivé Milian en un contenedor / ASSOCIACIÓ VEÏNS VERNEDA ALTA
PROTECCIÓN DEL PATRIMONIO
La obra destruida de Olivé Milian no estaba protegida ni catalogada. Para que no vuelva a ocurrir algo parecido, el Ayuntamiento de Barcelona y el mismo Centre d'Estudis de Sant Martí de Provençals declaró este martes la posibilidad de declarar los mosaicos que quedaron intactos Bien de Interés Local.
Además, el consistorio tiene ya un portal llamado El mosaic del meu barri con una amplia base de datos de los mosaicos de la ciudad. Una herramienta que podría empezar a usarse para proteger estos elementos decorativos tan característicos cada vez que se conceda un permiso de obras.