El comercio ambulante ha sido durante los últimos 10 años el principal motivo de denuncia por incivismo en Barcelona, copando la mitad de quejas (50%) recogidas por la Guardia Urbana durante este periodo.
El último caso registrado, el pasado jueves por la noche cuando varios agentes del cuerpo policial de la ciudad intervinieron contra la venta ambulante no autorizada en la zona de Montjuïc. La Guardia Urbana de la ciudad arrancó un operativa donde intervino un total de 1.135 objetos.
Recientemente los Mossos d’Esquadra y la Guàrdia Urbana de Barcelona pusieron en marcha un nuevo operativo policial contra la venta ambulante en la ciudad. La policía consiguió desalojar a los manteros de plaza de Catalunya donde pudo intervenir un total de 915 objetos e interponer 21 denuncias por la comercialización ilegal de productos.
Otro caso muy sonado es la venta ambulante en la playa. Un viernes por la tarde en la Barceloneta decenas de vendedores ambulantes asaltan a los que desean descansar y tomar baños de sol y mar, tensando un ambiente que en principio debiera ser relajado. Según ha contabilizado este medio, en una hora se rebasaron los 60 comerciantes ilegales que transitaban y acaparaban la atención entre las toallas.