Ya se sabía. A los perros les quedaba un telediario para poder seguir paseando a sus anchas por el Turó Park. El Ayuntamiento de Barcelona ha anunciado que a partir de este martes todos los perros –sin excepciones– tendrán la entrada prohibida al histórico parque que, paradójicamente, fue el primero de la ciudad que acogió un concurso canino, hace más de un siglo.

Como alternativa, el consistorio de Ada Colau ha habilitado una nueva zona de recreo de 1.100 metros cuadrados en los Jardines de Piscinas y Deportes, también en el distrito de Sarrià-Sant Gervasi. La medida es la respuesta municipal ante algunas quejas vecinales por el uso incívico de la zona. Pero, ¿la solución debía pasar por prohibir la entrada a los perros?

“Lo que tendría que haber hecho el ayuntamiento es hacer cumplir la normativa”, ha contado Bartolomé Criado, presidente de la Asociación de Comerciantes y Vecinos del Turó Park, a Metrópoli Abierta. “Hace mucho tiempo que estamos pidiendo vigilantes en el parque y sanciones a aquellos dueños que no llevan a sus perros con correa y a los que no recogen los excrementos”, ha añadido Criado. Pero sus plegarias no han sido atendidas.

Según ha recalcado el Ayuntamiento en un comunicado, en los últimos años el Turó Park ha sufrido "un deterioro, en parte, por la presencia de numerosos animales de compañía", por lo que ahora, con su reubicación en la área de Piscinas y Deportes, el consistorio considera que "se recuperará un espacio emblemático de la ciudad para uso vecinal".

El jardín histórico de Barcelona, "de gran riqueza paisajística y de gran valor artístico", está en proceso de remodelación para "reforzar el carácter verde del parque", han asegurado fuentes municipales. Sin embargo, los vecinos no tienen mucha esperanza. Creen que ya se ha perdido demasiada vegetación: olmos y un algarrobo centenario, entre algunos de los árboles caídos en combate.

PAGAN JUSTOS POR PECADORES

“No han hecho lo que tenían que hacer para mantener este parque histórico. Habrá que ver cómo evoluciona, pero esta decisión perjudicará a mucha gente”, ha explicado el regidor presidente del distrito de Sarrià-Sant Gervasi, Jordi Martí del PDeCAT, a Metrópoli Abierta. “Ahora con esta prohibición están pagando justos por pecadores”, han coincidido las dos fuentes consultadas por este medio.

La nueva zona habilitada para los perros que ya no pueden entrar al Turó Park



Una de estas afectadas es Marta Diumenjo, defensora de los animales, vinculada al movimiento Turó Can. “Los que tenemos perros le dábamos vida al Turó Park. Señoras mayores se reunían en el parque con sus perros... ¡era su punto de encuentro!”, ha confesado la vecina a Metrópoli Abierta. De hecho, hace unos años, recogieron más de 8.000 firmas para frenar el proyecto de prohibición. Y lo frenaron.

CRÍTICAS A COLAU

“Esta prohibición no encaja con un partido que dice ser ecologista y animalista”, ha añadido apesadumbrada. En este caso, están a favor de “una convivencia” y han pedido comprensión al gobierno de Colau porque en Barcelona “cada vez hay más perros”. Aproximadamente, 151.000 llevan el microchip.

Además, este sector ha denunciado que la nueva zona sea solo de arena –sin nada de césped– y que solo se pueda acceder por unas escaleras, mientras que por la entrada principal de los Jardines de Piscinas y Deportes no podrán entrar con los perros. “Estamos totalmente en contra y no descartamos futuras acciones”, ha concluido Diumenjo.

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