Los Mossos d'Esquadra han detenido este viernes al ladrón de la burundanga, un hombre que el 17 de marzo drogó con esta sustancia a la empleada de un bar de la Zona Franca para robarle 2.000 euros de la caja registradora. Los agente sospechan que este presunto delincuente de 46 años usó el mismo método, al menos, en tres ocasiones más en Barcelona y Esplugues de Llobregat.
Metrópoli Abierta ha tenido acceso al vídeo entero que muestra la secuencia de los hechos. El ladrón, vestido con ropa de operario, pide un cruasán y le da un billete de 10 euros a la mujer para pagar. Cuando esta se gira, el hombre vierte un sobre con la supuesta droga en la bebida de la camarera, depositada también en la barra. Son las 7.23 horas de la mañana.
SANGRE FRÍA
El ladrón desaparece de escena, pero vuelve a aparecer a las 7.44, veinte minutos más tarde. En ese momento los efectos de la burundanga empiezan a hacer estragos en la víctima, que empieza a perder facultades y queda anulada por la sustancia. No reacciona ante los comentarios de los clientes, que le reclaman pagar la cuenta, o bien una consumición.
Demostrando mucha sangre fría, el atacante entra en la barra para, supuestamente, ayudar a la mujer, muy aturdida y sin hablar, de espaldas a los clientes. El detenido se acerca a la máquina de café y finge que intenta servir las consumiciones. A un cliente que quiere pagar le dice que se vaya a otro bar. Cuando no hay personas a la vista, empieza a rebuscar por la barra y los armarios en busca del dinero. Mientras, la mujer sigue de pie, bloqueada enfrente de la máquina.
LA VÍCTIMA, ATURDIDA
Cuando tres clientes habituales que llaman a la trabajadora por su nombre se acercan para preguntar qué ocurre, el hombre dice que no hay café y que la máquina está rota. La camarera empeora y pierde el conocimiento instantes después de sentarse en un taburete. El ladrón la moja con agua en la frente y parece reaccionar, pero acto seguido vuelve a quedar aturdida El asaltante sigue buscando en la barra cualquier cosa para robar, se mete algo en el bolsillo. Finalmente, abandona el bar a las 7.53.
Nueve días después de los hechos, los agentes han detenido al autor del robo alrededor de las 12:00 horas, después de que un guardia urbano fuera de servicio reconociera al presunto autor del robo y avisara a los investigadores de la policía catalana del barrio de Sants.