La Guardia Urbana, a la caza de brujas por las filtraciones a la prensa
El jefe de la Guardia Urbana amenaza a los agentes con "responsabilidades penales y/o disciplinarias" por pasar informaciones a los medios
31 marzo, 2022 00:00Noticias relacionadas
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El jefe de la Guardia Urbana, Pedro Velázquez, ha enviado una nota informativa a los agentes del cuerpo policial en la que prohíbe facilitar informaciones "fuera del ámbito policial, obtenidas en el ejercicio de sus funciones, sin utilizar los canales formales". En caso contrario, los policías se pueden enfrentar a "responsabilidades penales y/o disciplinarias". La Jefatura de la Guardia Urbana tiene intención de "hacer un seguimiento de aquella información que pueda ser cedida sin observar los canales al efecto", subraya el texto al que ha tenido acceso Metrópoli.
El documento, fechado el 25 de marzo, llega a poco más de un año de las elecciones municipales y con la inseguridad como la principal preocupación de los ciudadanos de Barcelona. Según el Barómetro Municipal de diciembre de 2021, casi el 21% de la población lo ve como el problema más grave de Barcelona. El porcentaje sube casi siete puntos respecto al pasado verano. Pero la inquietud viene de lejos. La inseguridad lidera el Barómetro desde finales de 2018. En diciembre de 2019, se disparó hasta el 29,1%. Siempre con Ada Colau como alcaldesa.
"PERJUICIOS PARA LA INVESTIGACIÓN POLICIAL"
Velázquez dice que en ocasiones se han detectado detalles en la información que publican los medios que solo conocen los miembros de la Guardia Urbana. "Estos hechos pueden comportar perjuicios muy relevantes en la investigación policial y, especialmente, para las víctimas de los hechos delictivos y de sus familiares, que podrían conocer por la prensa antes de ser informados de forma oficial con las previsiones correspondientes (psicólogo, apoyo familiar...)", escribe el intendente mayor.
INFORME SOBRE LOS 'LATIN KINGS'
La nota informativa dirigida a los agentes llega después de que Metrópoli haya publicado algunas noticias sobre problemas de seguridad en Barcelona. Una de ellas fue un informe del propio Ayuntamiento de Barcelona que ponía el foco en un grupo de latin kings que atemorizaba al vecindario de las calles de Montserrat de Casanovas y Pintor Pradilla, en el límite entre El Carmel y la Font d'en Fargues. Según ha podido saber este medio, la filtración de este informe ha sido uno de los detonantes de la carta. De hecho, la información de Metrópoli es del 24 de marzo y la nota informativa de Velázquez del día siguiente.
Hace algo más de una semana, este medio también informó de una presunta agresión sexual en la calle de los Almogàvers por sumisión química. Metrópoli tuvo acceso a datos policiales de los Mossos d'Esquadra en los que se informaba que esta persona fue atendida por agentes de la Guardia Urbana. Este digital intentó confirmar los hechos en fuentes oficiales del propio ayuntamiento que no aportaron ninguna información y pidieron que se trasladara la consulta a los Mossos d'Esquadra, el cuerpo que lleva este tipo de investigaciones. Desde el servicio de prensa de Mossos sí informaron y aseguraron que no había ninguna denuncia y que al tratarse de un delito semiprivativo no se iba a investigar.
468 VÍCTIMAS DE AGRESIONES SEXUALES EN BARCELONA
La petición de información sobre este presunto caso de agresión sexual se hizo en un momento crucial. El hecho tuvo lugar la misma noche en que se produjo una violación en la playa de Barceloneta, en la que el presunto agresor, además de atacar sexualmente a una joven, la golpeó de forma brutal, un caso cuya difusión tampoco gustó a la Jefatura de la Urbana. El quid de la cuestión está en que sin la información de fuentes policiales no oficiales, la opinión pública no se hubiera enterado del caso porque muy probablemente la Guardia Urbana y los Mossos no hubieran dado cuenta del asunto. Según el Hospital Clínic, en 2021 atendieron a 468 víctimas de agresiones sexuales en Barcelona, una cifra preocupante y muy similar a la de antes de la pandemia.
Recientemente, este medio ha publicado la aparición del cuerpo sin vida de una mujer en aguas del Port de Barcelona y, según una información avanzada por La Vanguardia, la joven fue agredida sexualmente y arrojada semidesnuda en un muelle. Metrópoli intentó corroborar esta información en el departamento de prensa de la Guardia Civil, pero el Instituto Armado no dio ningún dato relevante y se limitó a decir que estaban todas las hipótesis abiertas. Los citados casos son solo algunos ejemplos de informaciones que si no se hubieran filtrado difícilmente habrían trascendido con tantos detalles.
'CASO CDR': EL JUEZ NO APRECIÓ DELITO
De hecho, en un caso incluso más sonado y sensible, las detenciones por presunto terrorismo de miembros de los Comités de Defensa de la República (CDR) en varias localidades de Cataluña en 2019, las filtraciones a periodistas terminaron en nada, pese a que se judicializaron. La sala de Instrucción número 41 de Madrid citó en calidad de investigados a una decena de periodistas de medios de comunicación como SER, RTVE, Abc, La Vanguardia, El Mundo, El Confidencial y El Español al trascender datos de una investigación que era reservada.
La causa por revelación de secretos se archivó en el juzgado de Instrucción número 47 de Madrid. El togado titular sobreseyó el procedimiento al considerar que "son numerosas las difusiones públicas de diligencias judiciales reservadas por la prensa en España, sin que ello dé origen a ninguna causa criminal, máxime cuando se trata de informaciones de gran interés público como en el presente caso”.
Para el intendente mayor de la Guardia Urbana, determinadas informaciones se tienen que mantener en secreto "para preservar los derechos de las personas afectadas y no vulnerar las obligaciones legales y deontológicas más básicas de nuestra profesión". En la misma nota informativa, Velázquez afirma que la labor informativa de los medios de información requiere el conocimiento inmediato por parte de la institución de aquellos hechos que hayan despertado el interés periodístico. "Esta necesidad comporta que los periodistas pidan a los departamentos de comunicación de la Guardia Urbana y de Alcaldía los datos vinculados a hechos noticiables".
BUSCAR INFORMACIÓN EN LOS AGENTES DIRECTAMENTE
En ocasiones, prosigue Velázquez, "los propios medios buscan información directamente a los agentes de la Guardia Urbana". Las filtraciones a medios por parte de cuerpos policiales o judiciales están a la orden del día, y basta con echar un vistazo a diario en periódicos o en informativos de televisión o radio para comprobar la frecuencia con que aparecen informaciones de delitos que han sido filtrados por personas muy cercanas a las investigaciones. Es obvio, que a menudo los periodistas consideran insuficiente la información oficial.
Velázquez considera que la Oficina de Relaciones Institucionales y Comunicación (ORIC), en coordinación con otros departamentos, "aporta los detalles de las intervenciones de la Guardia Urbana en todos los ámbitos, de forma consensuada con otros cuerpos y/o otras entidades involucradas. Esta información es veraz, completa y compleja con la voluntad de la Prefectura de comunicar todas las intervenciones meritorias en que la Guardia Urbana haya participado". Y puntualiza que en 2020 la presencia de la policía local en la prensa se incrementó un 97%, con 3.522 apariciones.
CONFIDENCIALIDAD Y CASOS BAJO SECRETO DE SUMARIO
Tras tener conocimiento de esta nota informativa, Metrópoli ha pedido una valoración de la misma al Ayuntamiento de Barcelona. Fuentes municipales destacan que "la Jefatura de la Guardia Urbana da diferentes y variadas indicaciones a los agentes que forman parte del cuerpo. Es normal y común". Sobre la relativa a las relaciones con los medios de comunicación "sirve para recordar a los agentes que las relaciones con los medios de comunicación se llevan desde el departamento correspondiente". Las actuaciones policiales se rigen bajo los principios de confidencialidad, y algunas de ellas incluso bajo secretos de sumario marcados desde los juzgados, recuerdan las fuentes consultadas.