La vuelta a la normalidad de Sant Jordi en Barcelona ha estado pasada por agua, viento e incluso granizo. Las lluvias más fuertes han arrancado alrededor de las 13:00 horas, cuando transeúntes han tenido que refugiarse y los libreros y floristeros han tenido que resguardar los objetos para que no se mojasen.
Los bomberos tratan de arreglar el desastre ocasionado por el viento en la 'superilla' literaria / CEDIDA
No obstante, alrededor de las 14:00 horas, los destrozos han sido mucho mayores. Unas fuertes rachas de viento han invadido la nueva superilla literaria y han salido volando muchos toldos, mesas y lonas de plástico. Además, también han caído ramas de árboles que han llegado a herir a varias personas.
Agentes de la Guardia Urbana y los Bomberos intervienen ante los destrozos / CEDIDA
UN HERIDO
De hecho, una persona ha quedado herida de carácter leve al caerle encima una carpa de la infraestructura. La caída de la estructura de la carpa –que protegía cinco casetas de la librería La Central– no solo ha golpeado a la persona que ha quedado herida, sino que ha dado a otros viandantes que paseaban por la zona.
Tras los hechos, La Central ha explicado en sus redes sociales que se ha visto obligada a anular las firmas de libros porque se han quedado sin parada.
Bomberos en el lugar donde una persona ha quedado herida tras caerle una carpa de la 'superilla' literaria / CEDIDA
DESPLIEGUE
Hasta el lugar de los hechos se han trasladado diversas unidades de Bombers de Barcelona y Guardia Urbana y dos ambulancias del Servei d'Emergències Mèdiques (SEM), que han tenido que atender a varios visitantes.
Despliegue de bomberos, Guardia Urbana y ambulancias en el lugar en el que una persona ha quedado herida tras caerle una carpa / METRÓPOLI