Fue el otro Pride. El fin de fiesta del colectivo LGTBI en Barcelona se saldó con una multitudinaria fiesta en la avenida de Maria Cristina tras la marcha por el Orgullo que reunió a unas 90.000 personas en el Paral·lel.
El servicio de seguridad privada se tuvo que emplear a fondo para intentar minimizar los delitos. Pese a ello, se produjeron algunas detenciones y los robos superaron de largo el centenar, ha avanzado Crónica Global. También fue habitual la presencia de vendedores ilegales de alcohol. Según los vigilantes, ellos hicieron tres arrestos en el Pride
LA ARTERIA DESBORDADA
La avenida de Maria Cristina se vio completamente desbordada, con miles de personas. Fuentes del sector de seguridad privada explican que los servicios sanitarios tuvieron serios problemas para llegar a las personas que requirieron algún tipo de asistencia. "No podían pasar, no había carriles de seguridad para ellos".
Un detenido por parte de seguridad privada en el Pride / CRÓNICA GLOBAL
Los robos en el Pride no es la primera vez que ocurren. En 2018, por ejemplo, la policía ya arrestó a cinco mujeres por sustraer móviles. Y en 2019, un clan de colombianos también se dedicó a desvalijar en la fiesta LGTBI.