El intendente jefe de la Guardia Urbana de Barcelona, Pedro Velázquez, ha afirmado que en 2023 cerraron "casi 150 locales entre narcopisos y puntos de venta de droga" en la ciudad junto a los Mossos d'Esquadra.
En una entrevista de El Periódico de Catalunya, ha destacado el papel de la Urbana por su conocimiento de lo que pasa en los barrios: muchas veces descubren locales con droga por quejas ciudadanas de jeringuillas en el suelo, ruidos u olores.
Preocupación por los clubs cannábicos
Sobre la función de la Urbana de inspeccionar clubs cannábicos, ha dicho que hay unos 250 y que le preocupa porque "la actividad que realizan una parte de ellos casi puede asimilarse con la venta de sustancias ilegales".
Tarros con cannabis de uno de los clubes cannábicos
Velázquez está convencido de que Barcelona es segura, aunque tiene los riesgos propios de las grandes ciudades, y que el "delito estrella" es el hurto.
También ha destacado que "está funcionando muy bien" el primer año del servicio de atención a la víctima de violencia machista, que pretende vincular a la mujer a algún servicio asistencial, tanto si denuncia como si no, por lo que considera que cumplen su función de policía de proximidad.