El RCD Espanyol, fiel a su antiguo himno, sigue posicionándose como un club deportivo, sin ninguna vocación política, “a pesar” de su “grandeza”. En pleno debate sobre el derecho a decidir de Catalunya, el club ha optado por mantenerse al margen y ha negado su apoyo al Govern que preside Carles Puigdemont en su conflicto con el Gobierno español.
A diferencia del Barça y del Girona, los otros clubes catalanes de Primera, el Espanyol se mantiene al margen de los últimos acontecimientos y lamenta las tensiones internas que se viven entre su masa social. “Os leemos pericos, y nos duele que discutáis. Por eso creemos que hay que mantener al Espanyol y al deporte al margen de estos avatares políticos-sociales”, argumenta el club a través de las redes sociales.
SÁNCHEZ LLIBRE, CONDAL Y COLLET
“El Espanyol es como vosotros: un club valiente. Y entendemos que hoy ser valiente es no atizar el conflicto en la sociedad catalana y entre pericos. En este sentido, y con respeto a todos, creemos que los posicionamientos llenos de palabras vacías no ayudan en ningún caso”, añade la entidad.
El Espanyol, desde que Chen Yanseng se convirtiera en el nuevo propietario del club, se ha desmarcado de sus posicionamientos catalanistas que adoptó durante los mandatos de Daniel Sánchez Llibre, Ramon Condal y Joan Collet.