No podía tener mejor previa el torneo de tenis por excelencia de Barcelona, el Conde de Godó –últimamente denominado Open Banc Sabadell, su patrocinador- que empieza a disputarse este lunes en las pistas del RCT Barcelona.
Aunque ya suma 31 años en su DNI, Rafael Nadal sigue en racha esta temporada, precisamente cuando empieza su mejor superficie: el polvo de arcilla. Este domingo ha barrido en la final del Open de Montecarlo al japonés Kei Nishikori (6-3, 6-2) logrando así su 11º título en el primer Masters 1000 ATP de la temporada de tierra batida.
De esta forma, el mallorquín se presentará en Barcelona para intentar alcanzar precisamente la misma cifra exitosa: su 11ª corona. Once sería también su estratosférico título si, en mayo, es capaz de repetir en Roland Garros, el segundo de los cuatro Grand Slams tenísticos (los otros son Open de Australia, Wimbledon y Open USA). En Melbourne, el pasado enero, venció Roger Federer después de que Nadal se retirase lesionado en cuartos de final.
Hace unas semanas el suizo anunció que no pensaba disputar torneo alguno en arcilla, dejando el camino libre para que el español siga siendo el Nº1 mundial, así como indiscutible Rey de la Tierra. No obstante, la renuncia de Federer es un regalo envenenado: le obligará a tener una actuación estelar para mantenerse como Number One en la clasificación ATP, ya que Roger no defenderá ni un solo punto en tierra -Rafa, todos los que ganó en 2017.
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Con esta victoria, Nadal ha conseguido el triple objetivo que perseguía en el Sporting Club de la capital monegasca: conservar el Número 1 en la clasificación mundial; superar al serbio Novak Djokovic en títulos ganados en la categoría Masters 1.000 (31 por 30 del serbio), y, por último, anotarse ese 11º título en el Principado de Mónaco.
Así pues, Nadal aterrizará este lunes en Barcelona –aunque no empezará a jugar hasta el miércoles- con este increíble bagaje histórico sobre su querida superficie roja:
-54º títulos totales
-90 % de partidos ganados (324 sobre 359)
-36 sets consecutivos ganados
-No pierde un set desde los ¼ de final de Roma-2017
Por tanto, este Godó 2018 llega con los mejores augurios para todo aquel que quiera ver el mejor tenis del mundo. No tan solo por ver en directo al manacorí, sino, y además, porque Nole Djokovic se ha apuntado al torneo tras caer en Montecarlo. El que fuese gran dominador mundial del tenis hace pocos años, ahora en crisis, viene a Barcelona para preparar mejor un nuevo asalto a Roland Garros y recuperar así su mancillado prestigio. Pero enfrente tendrá a Nadal, que va camino de repetir su cosecha triunfal de la pasada campaña en tierra: Montecarlo, Barcelona, Madrid y París.