Stanley Kubrick bate un récord histórico en Barcelona

Ante los augurios catastrofistas, la cultura ha demostrado que está viva. Que sigue viva. La retrospectiva del cineasta Stanley Kubrick ha batido un récord histórico en el Centre de Cultura Contemporània de Barcelona (CCCB) tras haber recibido 137.605 visitantes. Así lo ha anunciado la entidad que clausurará la exposición este domingo –después de cinco meses– con el mayor éxito de público en la historia del espacio cultural.

Su retrospectiva propone un paseo trufado de detalles y proyecciones de los filmes de Kubrick repartidas en varias salas. El recorrido cronológico abarca desde sus inicios como fotógrafo en la revista Look en Nueva York hasta su última creación –la más erótica– Eyes Wide Shut, pasando por 2001: Una odisea del espacio y la mítica Lolita.

CURIOSIDADES Y HOMENAJE A SUS INFLUENCIAS

En el paisaje irrumpen algunas curiosidades, como la reproducción de escenas censuradas por su contenido (homosexual, en el caso de Espartaco). También vestuario de películas tan aplaudidas hoy como, por ejemplo, El Resplandor o La naranja Mecánica, así como un pequeño homenaje a sus influencias. Véase Giacometti, véase Freud.

Carteles promocionales de las películas de Stanley Kubrick / PAULA BALDRICH

La muestra cuenta con más de 600 piezas y documentos, entre imágenes en movimiento, objetos y material procedente de los archivos personales del director, que incluye correspondencia con sus allegados y colaboradores. Esta retrospectiva única, comisariada por Hans-Peter Reichmann y Tim Heptner, del Deutsches Filmmuseum de Frankfurt, ha viajado a otras ciudades del mundo, como Ciudad de Mexico, Los Ángeles, Seül o París.

MATERIALES INÉDITOS DE KUBRICK

El crítico de cine y escritor Jordi Costa se ha encargado de su adaptación en el CCCB, que incorpora contenidos inéditos como nuevos materiales de 2001, que este año cumple su 50 aniversario; storyboards de "Barry Lyndon"; o entrevistas inéditas a actores y directores colaboradores de Stanley Kubrick.

El éxito de la retrospectiva demuestra que el ojo de Kubrick ha dejado huella. En los jóvenes, en las madres y padres, en sus hijos, en los cinéfilos. El mismo Stanley decía que “el completo sinsentido de la vida fuerza al hombre a crear su propio sentido”. Y así lo han hecho sus seguidores. Buscando la comprensión... a través de su cámara.