Caída en picado de las visitas a los museos de Barcelona

Los museos de Barcelona lo están pasando especialmente mal durante la crisis del coronavirus. Desde el final del confinamiento y hasta octubre no han remontado, la afluencia respecto al mismo período del 2019 es mucho más baja: hasta un 90% inferior en el Museu Picasso, un 75% en el MNAC, un 80% en el Macba y un 68% en el CCCB. La causa principal de esta caída de visitantes es la ausencia de turistas en la ciudad.

Pese a que en las últimas semanas se han salvado del cierre de la actividad cultural ordenado por el Govern, ni este motivo ni el confinamiento perimetral de la capital catalana durante los fines de semana parecen haberles favorecido. Pero siguen abiertos. Y mientras esperan que la crisis sanitaria remita para empezar a rehacerse, algunos aspiran a atraer más público barcelonés.

APRENDER DE ESTA CRISIS

El MNAC y también el Museo Picasso han aprendido lecciones de esta crisis, y una de ellas tiene que ver con el público al que se dirigen. “La situación hoy es por supuesto excepcional y diferente de un año normal en el museo, que tiene mucho público internacional”, ha afirmado este sábado el director del Museo Picasso, Emmanuel Guignon, en unas declaraciones dadas a Betevé.

También destaca que han doblado el número de visitantes barceloneses durante estos meses e indica que ello les “conviene” mucho. Y es que el próximo año y hasta el 2023 se celebrará el 50º cumpleaños de la muerte del pintor malagueño. Por ello, el museo trabajará “más que nunca” sobre su propia colección y específicamente en la presencia de Picasso en Barcelona y las relaciones entre el artista y su ciudad de adopción.

Por otro lado, para el director del MNAC, Pepe Serra, las circunstancias de la pandemia y la “psicología del ambiente” han contribuido al hecho que tampoco el público local, habitual o no, fuera suficiente para remontar. Serra cree que ahora “toca aguantar” y pensar que “por poco que mejore” la situación sanitaria “se tendrá que notar una respuesta”. En este sentido, Serra asegura que el museo prepara un 2021 “muy finalista, con proyectos muy concretos y un sentido social y cultural muy claro”.