Una de cada dos familias con menores del área de Barcelona ha reducido las actividades de ocio este año por problemas económicos, según ha informado este lunes la ONG católica Cáritas Diocesana de Barcelona, que ha atendido este verano a más de 400 niños y jóvenes en sus centros de actividades de ocio gratuitas.

En la diócesis de Barcelona, el 40% de las familias con niños y adolescentes viven en situación de exclusión social, cifra que sube al 50% en el caso de las familias monoparentales.

PROBLEMAS ECONÓMICOS 

En su campaña Ningún niño sin verano, Cáritas ha contado con el apoyo de 23 clubes deportivos y centros de ocio, que han cedido gratuitamente plazas para que estos niños puedan participar en sus campus de verano.

"Durante el último año, una de cada dos familias con niños que viven en Barcelona o municipios de su alrededor se ha visto obligada a reducir las actividades de ocio por motivos económicos", ha explicado la responsable de análisis social de Cáritas Barcelona, Míriam Feu.

INGRESOS

"El 20% de los hogares con niños y adolescentes atendidos por Cáritas viven sin ningún ingreso. En este contexto, las actividades de ocio y deportivas son más necesarias que nunca para que los niños y adolescentes puedan disfrutar de un tiempo de calidad donde desarrollar sus habilidades", ha subrayado Feu.

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