Piqué y Shakira sellan su separación ante el juez

Punto y (quizá) final del periplo que ha supuesto la separación entre el furbolista Gerad Piqué y la cantante colombiana Shakira. Ambos se han personado en la mañana de este jueves en la Ciudad de la Justicia para ratificar ante el juez su acuerdo de separación, en el que se ha alcanzado un mutuo acuerdo en el que, sin lugar a dudas, el eje central lo ocupan los dos hijos de la pareja, Milan y Sasha.

Hace aproximadamente un mes, trascendió a los medios que la cantante colombiana se hacía con la tutela completa de los hijos fruto de la relación y que se mudaría, en cuanto la salud de su padre lo permitiera, de vuelta a su antigua mansión en Miami (EE.UU) y que se llevaría a sus hijos con ella. A cambio, el exdefensa del F.C Barcelona, que se quedaría en España, tendría la completa libertad de ir a visitarlos cuando quisiera.

En este sentido, el futbolista matizó que planeaba verlos unos 10 días cada mes. Los gastos derivados de los viajes de Miami a Barcelona se compartirían entre la ya rota pareja. “Hemos firmado un acuerdo que garantiza el bienestar de nuestros hijos y que se ratificará en el juzgado, como parte de un trámite meramente formal”, afirmaron ambos en un comunicado.

No obstante, que haya un mutuo acuerdo no significa que no haya tensiones en el seno de la pareja, especialmente visibles a la luz de las últimas imágenes captadas en un partido de sus hijos en el que Shakira le hacía la peineta en la distancia a Piqué. Otro elemento que ha escenificado la mala relación que ambos mantienen actualmente es que a los juzgados han entrado por puertas separadas y solo se han visto en el interior.

Shakira y Piqué a su llegada al despacho de abogados en Barcelona / EUROPA PRESS

Con respecto a las propiedades, la mansión de Esplugues de Llobregat se venderá cuando la cantante la abandone para volver a su antigua propiedad. Piqué, por su parte, seguirá en su actual piso ubicado en el centro de Barcelona.

El evento ha durado poco más de media hora. La ya rota pareja ha entrado en la sala judicial, ha llevado a cabo el trámite, y ha abandonado el monumental edificio, también por puertas distintas, sin hacer declaraciones a la prensa que se encontraba en ambas puertas.